DIABETES
Un nuevo fármaco antidiabético favorece la pérdida de peso
Carla Nieto. Madrid · 07 septiembre 2011
Una de las principales ventajas de la liraglutida es que se administra una sola vez al día, e independientemente de las comidas, lo que favorece la adherencia del paciente al tratamiento.
Se acaba de presentar liraglutida (Victoza), de Novo Nordisk, un nuevo tratamiento para el control de la diabetes tipo 2 que, además, ha demostrado otros beneficios, siendo el más importante la reducción del peso corporal. "Este aspecto es muy importante, sobre todo teniendo en cuenta que por lo general, las otras terapias existentes para el control de la diabetes producen en los pacientes un aumento de peso, incluso en aquellos que han incorporado en su estilo de vida medidas como la dieta y el ejercicio. En este sentido, se trata de un fármaco que rentabiliza el esfuerzo que pueda hacer el paciente respecto al control de su dieta”, explicó la doctora Susana Monereo, jefe de la Sección de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario de Getafe.
Concretamente, el fármaco ha demostrado que favorece una reducción de peso de entre el 5 y el 10%. Tal y como señaló el doctor Domingo Orozco, médico de familia del Centro de Salud de San Blas-Unidad de Investigación San Juan, en Alicante, “pequeñas pérdidas de peso en los pacientes con diabetes disminuyen las cifras de glucemia, de presión arterial y de lípidos. Debido a estos beneficios, sobre todo a nivel cardiovascular, estas reducciones de peso son muy importantes”.
Una de las principales ventajas de este nuevo fármaco es que su administración es más cómoda para el paciente ya que, a diferencia de otras terapias, que requieren adecuación horaria y ajuste de dosis, Victoza se administra una sola vez independientemente de las comidas, lo que supone un paso más respecto a otros antidiabéticos.
12% de la población
“Los resultados de los estudios clínicos demuestran que el fármaco controla la glucosa de forma sostenida en el tiempo. A ello hay que unir otros beneficios importantes, como el hecho de que haga que el vaciamiento gástrico resulte más lento; la reducción de los niveles de presión arterial sistólica y la mejora de la funcionalidad de las células beta del páncreas, por lo que tiene el potencial de retrasar la progresión de la enfermedad. Además, actúa a nivel del Sistema Nervioso Central, favoreciendo la sensación de saciedad”, señaló la doctora Monereo.
En cuanto a la situación de la enfermedad en nuestro país, el doctor Orozco comentó que actualmente la prevalencia es del 12% de la población, “una cifra que se ha incrementado notablemente en los últimos 20 debido en buena parte al aumento de los casos de obesidad. No hay que olvidar que la obesidad produce resistencia a la acción de la insulina, lo que acaba provocando el fracaso del páncreas en la producción de esta hormona y la aparición de diabetes”.