NEUMOLOGÍA
JANO.es y agencias · 30 marzo 2011
Un estudio publicado en The New England Journal of Medicine muestra que retrasa la aparición de la primera exacerbación en un 17% comparado a salmeterol.
El tratamiento con el anticolinérgico de acción prolongada tiotropio, comercializado por Boehringer Ingelheim y Pfizer como Spiriva, retrasa significativamente la aparición de la primera exacerbación de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), reduciendo el riesgo en un 17% en comparación con salmeterol.
Así se desprende de los resultados de un estudio con más de 7.000 pacientes publicados en The New England Journal of Medicine, que ha comparado de forma directa y a gran escala los efectos de ambos fármacos a lo largo de un año.
Las exacerbaciones son un indicador determinante de progresión de la EPOC y de deterioro de la función pulmonar, y su prevención es un objetivo primordial del tratamiento. Por ello, el estudio ha demostrado que el uso de tiotropio disminuye en un 14% el riesgo de la primera exacerbación moderada, y hasta un 28% el riesgo de exacerbaciones graves con necesidad de hospitalización.
Además, los efectos de este fármaco en el tiempo hasta la primera exacerbación y la tasa anual de exacerbaciones por paciente fueron los mismos en todos los análisis de subgrupos por edad, sexo, tabaquismo, gravedad de la EPOC, índice de masa corporal y uso de corticosteroides inhalados en el período basal.
Según ha destacado el Dr. Claus Vogelmeier, del Servicio de Enfermedades Pulmonares del Departamento de Medicina Interna de la Universidad de Marburgo (Alemania), este ensayo a gran escala “avala la utilización de tiotropio como opción de primera línea para el tratamiento de mantenimiento de la EPOC, con vistas a minimizar el riesgo de exacerbaciones desde las primeras fases de la enfermedad y prolongar la vida activa de los pacientes”.