El Gobierno español y la Generalitat de Catalunya han destinado, a partes iguales, 30 millones de euros a la creación del Centro Nacional de Análisis Genómico (CNAG) en el Parque Científico de Barcelona para asegurar la competitividad del Estado en este ámbito y garantizar su participación en el Consorcio Internacional del Genoma del Cáncer (ICGC).

 

La puesta en marcha de este centro de 1.200 metros cuadrados se formalizó ayer con la firma del convenio entre el presidente de la Generalitat, José Montilla; la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia; la consejera de Salud, Marina Geli; el consejero de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huget, y el director del Parque y rector de la UB, Dídac Ramírez.

 

Como sede española del Consorcio, el centro realizará una secuenciación masiva de muestras tumorales para descifrar el genoma de la leucemia linfática crónica, una de las más frecuentes en países occidentales. El Consorcio cuenta con la participación ocho estados -España, Estados Unidos, Canadá, Australia, Japón, China, India, Francia y Reino Unido-, y tiene por objetivo crear un catálogo de todas las alteraciones del genoma en 50 tipos de cáncer.

 

Esta instalación de 1.200 metros cuadrados también formará a tecnólogos; cubrirá la demanda de secuenciación masiva de centros de investigación, hospitales y empresas, y participará en proyectos de I+D con entidades públicas y privadas, tanto nacionales como internacionales. Asimismo, beneficiará a sectores como la biomedicina, agricultura, biotecnología de alimentos y ambiental, y energías renovables.

 

Tras la firma del convenio, Garmendia destacó que se trata de una instalación “única en Europa” y sede del “mayor proyecto” de investigación genómica que ha abordado España, y explicó que Gobierno y Generalitat han financiado el CNAG a partes iguales. Es un “hito notable” en la colaboración entre ambas administraciones, afirmó.

 

Añadió que el Ministerio ha aportado 10 millones de euros adicionales para la participación en el Consorcio, y recordó que en 2009 destinó 900 millones de euros a la investigación e innovación en Cataluña. “Es un día grande para la ciencia catalana y española”, concluyó.

 

Montilla subrayó la “gran ambición” del proyecto, y consideró que es un “hito caudal” para dar proyección internacional a la investigación biomédica en Cataluña. Supone la transición a un “nuevo modelo productivo”, aseguró, y reafirmó la apuesta del Gobierno catalán por la investigación y la innovación.

 

Ramírez remarcó que el Parque Científico de Barcelona es un entorno multidisciplinar de “gran proyección” y uno de los “clusters” de investigación más importantes del Estado, al contar con 4 institutos de investigación, 75 empresas, una incubadora de empresas biotecnológicas y más de 70 grupos de investigación.

 

El investigador y director del CNAG, Ivo Gut, elogió la “competencia” de los científicos en España, y se refirió al centro como “un gran reto”. Según explicó, la genómica es clave para aumentar la seguridad alimentaria; mejorar la detección y tratamiento de enfermedades como el cáncer, y producir energías renovables.

 

Supervisará el convenio una Comisión de Seguimientos formada por dos representantes del Ministerio; uno de la delegación del Gobierno en Cataluña; tres de la Generalitat, y uno de la Fundación Parque Científico de Barcelona. La comisión también creará un nuevo convenio para dotar de personalidad jurídica y estatutos al CNAG, y revisará su plan de acción.