GERIATRÍA
JANO.es · 29 septiembre 2009
El riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares se duplicó con niveles de vitamina D inferiores a 25 nmol/l
De acuerdo con los resultados de un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Colorado en Denver (Estados Unidos) y publicado en el último número de la revista Journal of the American Geriatrics Society (2009;57:1595-1603), los niveles bajos de vitamina D incrementan significativamente el riesgo de mortalidad en los adultos de edad avanzada.
La piel produce vitamina D cuando se expone al sol. Pero los adultos mayores, en especial los que viven en las regiones nórdicas, rara vez acceden a suficiente exposición solar como para producir la cantidad adecuada de vitamina D, por lo que necesitan tomar suplementos para alcanzar niveles saludables. Las evidencias apuntan cada vez más a los riesgos para la salud de los niveles inadecuados de vitamina D.
Así, los investigadores, dirigidos por el Dr. Adit A. Ginde, evaluaron el riesgo de muerte según los niveles de vitamina D en el organismo en 3.408 varones y mujeres incluidos en la Tercera Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (NHANES III). La media de edad de los participantes se estableció en 73 años.
Concluidos los más de siete años de seguimiento, 1.493 personas murieron (casi el 44%). Poco más de la mitad de esos decesos fue por enfermedad cardíaca.
Tras considerar varios factores que podrían modificar los resultados, los niveles bajos de vitamina D estuvieron independientemente asociados con un aumento del riesgo de morir por cualquier causa, muy especialmente por enfermedad coronaria.
Falta de consenso
Se consideran niveles óptimos de vitamina D a aquellos entre 80 y 110 o 120 nmol/l (nanomoles por litro) de sangre, aunque bien las recomendaciones de las sociedades científicas, así como las guías de práctica clínica, no han sido universalmente consensuadas. En este contexto, los participantes tenían un nivel promedio de 66 nmol/l de sangre.
El equipo halló que el riesgo de morir por cualquier causa era un 83% más alto entre las personas con vitamina D por debajo de los 25 nmol/l, a diferencia de las personas con 100 nmol/l o más. El riesgo de morir era un 47% más alto en aquellos con vitamina D entre 25 y 49,9 nmol/l que en aquellos con 100 nmol/l o más.
Los bajos niveles de vitamina D eran especialmente dañinos para el corazón; el riesgo de morir por enfermedad cardíaca se duplicó en los participantes con vitamina D por debajo de los 25 nmol/l.
Sin embargo, como concluyeron los autores, “resultaría inadecuado establecer unas recomendaciones de vitamina D para los mayores de 65 años, pues se necesitarían investigaciones a gran escala para determinar los efectos de dosis más altas de suplementos de esa vitamina”.