MEDICINA GENERAL Y DE FAMILIA
El consumo de benzodiacepinas se asocia con un mayor riesgo de fractura de cadera o pelvis en personas mayores
JANO.es · 11 junio 2013
Un estudio señala que el uso de estos fármacos de forma prolongada se asocia a una disminución del estado de alerta, es decir, a un aumento de la somnolencia y una mayor torpeza de movimientos.
El consumo de benzodiacepinas está asociado a un mayor riesgo de fractura de cadera o pelvis en personas mayores, según un estudio presentado en el '33º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC)', que durante estos días se celebra en Granada.
La doctora Sonia Baró, coautora del estudio, ha expuesto en un comunicado que "el consumo de estos fármacos de forma prolongada se asocia a una disminución del estado de alerta, es decir, a un aumento de la somnolencia y una mayor torpeza de movimientos".
Para esta experta, estos factores "están asociados por sí mismos a un aumento del riesgo de caídas y como consecuencia a un aumento de fracturas en una población que ya de por sí es más frágil, dado que la edad comporta pérdida en la coordinación y estabilidad motoras".
En el participaron 468 personas mayores con una edad de media de 85 años que habían sufrido fractura de cadera o pelvis, y en casi en la mitad de los casos de fractura había consumo de benzodiacepinas.
Si bien estos fármacos son los que se prescriben habitualmente para el tratamiento de la depresión o la ansiedad, "son también cada vez más las personas mayores que acuden a nuestras consultas solicitándolos para dormir mejor o estar más tranquilos", señala Baró, quien considera que la sociedad está excesivamente medicalizada. En concreto, "en las personas mayores hay un exceso en el uso de benzodiacepinas", afirma.
Más incidencias en mujeres
Tanto la prevalencia de fracturas como el consumo de benzodiacepina fue mayor en las mujeres. De los 468 casos analizados, el 81% (380) correspondieron a personas de sexo femenino. Asimismo, de las 200 personas (42%) en que se daban fractura y benzodiacepinas, 174 (87%) eran féminas. "En las mujeres de entre 75 y 90 años y con un tratamiento crónico de benzodiacepinas es donde encontramos un mayor número de fracturas", ilustra la Dra. Baró.
El rango de edad con más fracturas de cadera o pelvis es el que va de los 75 a los 90 años. Por otro lado, el 90% de las personas que consumen estos fármacos tienen edades comprendidas entre los 75-95 años. Las benzodiacepinas más consumidas son las de vida media corta-intermedia (81%).
"Aunque todas las benzodiacepinas se deberían prescribir con cautela, las de vida corta son las más recomendables para las personas mayores, ya que los efectos desaparecen más rápido y, por tanto, el riesgo de caídas es menor", concluye la Dra. Baró.