Jueves, 28 de Marzo del 2024

Últimas noticias

ALERGOLOGÍA

El ejercicio físico, el alcohol y los antiinflamatorios son determinantes para activar algunas alergias alimentarias

JANO.es · 06 septiembre 2012

Según un estudio del VHIR, la intervención de alguno de estos cofactores eleva el porcentaje de reacciones anafilácticas del 17,6 hasta el 85,1%.

El Vall d'Hebron Institut de Recerca (VHIR) ha llevado a cabo el más amplio y completo estudio realizado hasta ahora para describir el papel de cofactores como el ejercicio físico, la ingesta de alcohol o los antiinflamatorios no esteroidales (AINE) como inductores de reacciones alérgicas alimentarias.

Según la Dra. Victoria Cardona, responsable de la Sección de Alergología del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitari del Valle de Hebrón y miembro del grupo de investigación de enfermedades sistémicas del VHIR, donde se ha llevado a cabo la investigación, "el trabajo pone de relieve la importancia de evaluar la acción de estos cofactores cuando se trate a pacientes con posibles reacciones alérgicas alimentarias".

El estudio ha recogido pruebas de 74 pacientes que presentaban alergias alimentarias inducidas por la acción de cofactores (ejercicio físico, ingesta de alcohol e ingesta de AINE) durante las 2 horas anteriores o las cuatro posteriores a la ingesta del alimento sensibilizante. Mientras que en el 82,4% de los pacientes la ingesta aislada del alimento sensibilizante no provocaba síntomas o sólo provocaba reacciones alérgicas de carácter leve, normalmente urticaria, la intervención de alguno de estos cofactores elevaba del 17,6% hasta el 85,1% el porcentaje de reacciones anafilácticas.

El 58% de los casos estaban relacionados con la ingesta de AINE, el 52,7% con el ejercicio y el 12,2% con la ingesta de alcohol. El tiempo de aparición de los síntomas oscilaba, en función del tipo de cofactor, desde los 75 minutos (AINE) hasta los 10 minutos (ejercicio).

En la mayoría de los casos el alimento reactivo era algún tipo de derivado vegetal. Concretamente, en el 91,7% de los casos la sensibilidad se debía a Pru p 3, una de las LTP más habituales, presente en frutas del grupo de las rosáceas, como el melocotón o la manzana.

Las LTP o proteínas transportadoras de lípidos son proteínas de defensa vegetales que se encuentran ampliamente distribuidas en los tejidos de muchas frutas, semillas y pólenes y constituyen uno de los alérgenos más habituales en adultos de la región mediterránea. Estas proteínas vegetales, a menudo, son responsables de reacciones cruzadas entre pólenes, vegetales y semillas. Las LTP mantienen su actividad alergénica incluso en alimentos procesados como zumos de fruta, vino o cerveza, ya que son muy estables tanto a variaciones térmicas como a procesos digestivos.

Uno de los datos más relevantes de la investigación es que, detrás de todos los casos de hipersensibilidad a la ingesta de AINE, había una combinación de esta sustancia con un alimento que contenía LTP o algún otro alérgeno. Según la doctora Cardona, "este tipo de reacciones alérgicas solían atribuirse al propio cofactor cuando la verdadera causa, el alimento, pasaba inadvertida".

El estudio pone de relieve la conveniencia de incluir pruebas que combinen los alérgenos alimentarios con estos cofactores en los protocolos de diagnóstico alergológico. Además, "las líneas de trabajo futuras deberían estudiar el papel de otros co-factores como enfermedades, estrés, cansancio o la menstruación, que ya han sido descritos como potenciales inductores de reacciones alérgicas", indica la doctora Cardona.

Más frecuentes en niños

Las alergias alimentarias afectan alrededor del 6% de los adultos de países occidentales y son aún más frecuentes en niños. Se trata de reacciones adversas a alguna sustancia presente en los alimentos (alérgeno), generalmente una proteína que dispara los mecanismos de defensa inmunitarios con la aparición de anticuerpos del tipo inmunoglobulinas E (IgE).

A menudo, el único tratamiento posible es evitar el alimento que contiene el alérgeno, pero es habitual que aparezcan reacciones cruzadas entre diferentes alimentos o entre polen y alimentos que contienen la misma proteína u otras de estructura similar, de manera que la lista de sensibilizantes se va ampliando. Los síntomas dependen del tipo de alérgeno, la vía de entrada al organismo y la capacidad del individuo de desarrollar una respuesta inmunitaria específica. Las manifestaciones clínicas pueden variar desde reacciones localizadas leves, como urticarias o síndromes de alergia oral (SAO) hasta reacciones anafilácticas generalizadas de extrema gravedad, lo que hace que sea muy importante determinar la causa concreta de cada alergia y evitar falsos diagnósticos debidos a este tipo de interacciones con otros cofactores.

Noticias relacionadas

28 Jun 2012 - Actualidad

La prevalencia de las alergias aumenta cada año un 2% entre la población adulta

Se estima que 10 millones de españoles padecen algún tipo de alergia, cifra que puede elevarse a 30 millones en los próximos años.

20 Jun 2012 - Actualidad

Los bebés alérgicos a la leche de vaca a los que se administra LGG adquieren la tolerancia en el primer año de vida

Un estudio muestra que este lactobacilo ayuda a superar antes los síntomas de la patología, que en España es la tercera de las alergias alimentarias.

17 Apr 2012 - Actualidad

El número de alérgicos aumenta un 2% cada año

Medio centenar de hospitales españoles conmemoran la Semana Mundial de la Alergia, que tiene por objeto lanzar un mensaje de concienciación a la población española acerca de la gravedad de las enfermedades alérgicas.

Copyright © 2024 Elsevier Este sitio web usa cookies. Para saber más acerca de nuestra política de cookies, visite esta página

Términos y condiciones   Politica de privacidad   Publicidad

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?