ONCOLOGÍA
Fotoprotección cada dos horas, entre los cuidados estivales de la piel de la paciente con cáncer
JANO.es · 02 julio 2013
El dermatólogo Ricardo Moreno recomienda un factor de protección solar mínimo de 30, aplicado 20 minutos antes de empezar la exposición y con repeticiones cada dos horas.
La paciente oncológica debe extremar la protección frente a la radiación ultravioleta de la luz solar en los meses de verano ya que su piel es especialmente vulnerable por “os cambios inflamatorios inducidos por la radioterapia y la quimioterapia, la sensibilización a la luz solar que provocan algunos fármacos o la supresión del sistema inmune que puede facilitar el desarrollo de infecciones cutáneas. Así lo ha manifestado el dermatólogo Ricardo Moreno Alonso de Celada, colaborador del Centro de Patología de la Mama-Fundación Tejerina en Madrid, que ha elaborado unas recomendaciones para el cuidado estival de la piel de las pacientes.
El doctor Moreno ha sugerido el uso de fotoprotectores en crema con al menos un factor de protección 30 –mayor en las pieles claras-, que deben aplicarse “en una cantidad suficiente, con una antelación de al menos 20 minutos a la exposición solar, repitiendo la aplicación al menos cada dos horas y siempre inmediatamente después de un baño, pues ningún protector es resistente al agua por completo”.
Asimismo, ha señalado algunas creencias erróneas respecto a la protección solar, como la utilidad de la sombrilla para escudar los rayos. “La sombrilla no nos aísla de la radiación reflejada a nuestro alrededor”, ha indicado el dermatólogo colaborador de la Fundación Tejerina, quien ha añadido la recomendación de protegerse “con ropa”, teniendo en cuenta que cuanto más oscuros sean los colores más luz absorben y, por tanto, mayor protección confieren. “Con la ropa la paciente oncológica también previene fenómenos como las manchas cutáneas por hiperpigmentación”, ha explicado.
Por último, también ha recomendado “incrementar la frecuencia de cremas emolientes, evitar el traumatismo epidérmico durante la depilación, y usar productos de limpieza de escaso poder detergente y desodorantes no alcohólicos para intentar evitar la sequedad cutánea”.