DIABETES
Los hijos de los inmigrantes tienen un peor control de la diabetes
JANO.es · 15 noviembre 2012
Un estudio de la Fundación Diabetes muestra que la situación económica y el nivel de estudios de las familias son determinantes en el control de la enfermedad.
Los hijos de inmigrantes con diabetes tienen más dificultades para controlar la enfermedad y sufren con más frecuencia subidas y bajadas de azúcar. Ello se debe, sobre todo, a la difícil situación económica de sus familias, y a la diferencia de costumbres e idioma.
El dato corresponde a un estudio elaborado por el Hospital de Sant Joan de Déu y financiado por la Fundación para la Diabetes, que, concretamente, muestra que los niños de origen inmigrante realizan menos controles diarios de los niveles de azúcar en sangre y de los hidratos de carbono en la dieta, sufren más hipoglucemias e hiperglucemias y tienen una mayor tasa de absentismo escolar que los hijos de padres españoles.
El trabajo se basa en 91 niños de origen inmigrante y 91 niños nativos con diabetes tipo 1 tratados en hospitales catalanes a los que se ha sometido a un análisis para conocer cómo han controlado la diabetes en los últimos tres meses.
El estudio revela que la situación económica y el nivel de estudios de las familias es uno de los factores que influye en el control de la diabetes: tanto los niños de origen inmigrante como los nativos cuyas familias tienen pocos ingresos muestran un peor manejo de la enfermedad, aunque el entorno de los niños de origen inmigrante es más desfavorable, con un 34% de los padres en el paro y con un 24% con rentas inferiores a los 800 euros.
Según los autores del estudio, además de los factores socioeconómicos, en el control de la diabetes también influyen los factores culturales como el conocimiento del idioma o las costumbres, de forma que las familias inmigrantes que hablan el catalán o el castellano controlan mejor la enfermedad.
El endocrinólogo del Hospital de Sant Joan de Déu Roque Cardona ha dicho que mejorar el tratamiento de la diabetes en niños inmigrantes pasa "por un control más intensivo citando a estos pacientes y teniendo un contacto directo por teléfono o a través de las nuevas tecnologías, por la adaptación de los consejos a su tipo de alimentación y a su idioma, y por el papel de la mediación cultural".
El 95% de los niños diabéticos tienen diabetes de tipo 1, una enfermedad que afecta en España a 18.000 menores, que necesitan hacerse controles diarios durante toda la vida e inyectarse insulina.