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La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, ha manifestado hoy que no es partidaria del copago, afirmando que la sanidad pública ha de seguir siendo “universal y gratuita” y que se debe seguir trabajando para buscar elementos de sostenibilidad “como en cualquier otro sector”. Y es que como ha recordado Jiménez, “se ha conseguido hacer de la sanidad pública una sanidad que es sostenible desde hace 30 años, no sólo incorporando nuevos pacientes, sino incluso nuevos avances médicos”.

 

Por otra parte, y por lo que refiere a la posible reforma de la ley antitabaco, la ministra ha lanzado un mensaje de tranquilidad al sector de la hostelería, señalando que la decisión se tomará teniendo en cuenta su situación, intereses y demanda. “Esta medida no tendría coste económico”, ha asegurado la ministra.

 

Asimismo, ha indicado que se ha realizado un estudio y se ha comprobado que de los 350.000 establecimientos que tendrían que haber hecho algún tipo de obra, menos del 1% han realizado algún tipo de reforma. “Se trata de una medida que va a beneficiar a toda la sociedad en conjunto”, ha afirmado, explicando también “que, ahora mismo, la ley se cumple a medias y, hasta este momento, se ha convertido en una de las leyes más permisivas de la UE. Y en los países en los que se ha prohibido fumar en lugares públicos, de ocio y establecimientos de restauración no ha tenido la menor incidencia económica. Es un efecto neutro porque la gente sigue acudiendo”.

 

 

 

Por su parte, y por lo que respecta a la gripe A(H1N1), la ministra de Sanidad ha resaltado que actualmente “el problema está en controlar la gravedad de los contagios”, señalando que la tasa de mortalidad a causa del virus A/H1N1 es más baja, de 0,12 casos por mil habitantes, pero que “hay que esperar a ver cómo evoluciona la enfermedad”.

 

A su vez, ha aclarado que la dispensación de oseltamivir (Tamiflu^®) sólo la puede indicar un médico y que sólo se puede comprar con receta médica. “Los protocolos se han elaborado con las comunidades autónomas y Tamiflu^® sólo está pensado para dispensarlo en casos de una enfermedad grave”, si bien se ha decidido que vuelva a ser dispensado en las oficinas de farmacia, siempre con receta médica. Y es que en el caso de la venta de fármacos por Internet, Jiménez ha recordado que un problema añadido es que se están vendiendo medicamentos que no son tales medicamentos. “Normalmente son fraudes y adulteraciones, y no medicamentos”.

 

Por último, y en relación con el aumento del consumo de la ‘píldora poscoital’, la ministra ha indicado que el fin último por el que se ha querido vender la píldora en las farmacias es que las mujeres que la necesiten puedan acceder a ella. “Aún es pronto para saber cómo evoluciona la demanda de la píldora”, ha concluido.