Un estudio norteamericano muestra que las personas que el equivalente a siete o más tazas de café al día triplican sus probabilidades de experimentar alucinaciones visuales o auditivas
Las personas que toman a diario altas dosis de cafeína, en forma de café, té o bebidas energéticas con cafeína, son más propensas a experimentar alucinaciones, como oír voces y ver cosas que no existen, según un estudio realizado por investigadores del Departamento de Psicología de la Universidad de Durham y publicado en "Personality and Individual Differences".
En concreto, los grandes consumidores de cafeína, que toman más del equivalente de siete tazas de café al día, tienen el triple de probabilidades de oír voces que no existen que aquellas personas que consumen bajos niveles de cafeína, menos del equivalente de una taza de café al día.
Los autores aseguran que estos hallazgos pueden contribuir a comenzar a entender mejor los efectos de la nutrición sobre las alucinaciones. Los cambios en la dieta, entre los que se incluyen modificaciones de la ingesta de cafeína, podrían situar a los pacientes en una mejor posición para superar las alucinaciones o influir en su frecuencia de aparición, según los científicos.
En este trabajo, preguntaron a un total de 200 estudiantes qué cantidad de productos con cafeína tomaban al día, como café, té, bebidas energéticas, barritas de chocolate o pastillas de cafeína. Asimismo, se les interrogó sobre su tendencia a sufrir alucinaciones y su nivel de estrés. Entre las experiencias narradas por los participantes se incluye ver cosas que no existen, oír voces y sentir la presencia de personas fallecidas.
Para los investigadores, este descubrimiento puede significar que la cafeína es una sustancia que consigue exacerbar los efectos psicológicos del estrés, ya que, cuando estamos nerviosos, nuestro organismo libera cortisol, cuya liberación en respuesta al estrés aumenta cuando acabamos de tomar cafeína.
"Es esta inyección extra de cortisol la que puede estar relacionando el consumo de cafeína con el aumento de la tendencia de una persona de sufrir alucinaciones", indicó Simon Jones, estudiante de doctorado en el Departamento de Psicología de la Universidad de Durham y director del estudio junto a Charles Fernyhough.
Para Jones, las alucinaciones "no son necesariamente un síntoma de enfermedad mental", ya que mucha gente "podría haber tenido experiencias como escuchar voces cuando no había nadie. De hecho, cerca del 3% de la gente corriente escucha esas voces". "Muchas de estas personas se enfrentan bien a este problema y desarrollan sus vidas con normalidad. Incluso existen organizaciones, como la Red de Personas que Oyen Voces, que pueden ofrecer ayuda y consejo a las personas con esta experiencia", concluyó.
Personality and Individual Differences 2009;doi:10.1016/j.paid.2008.10.032