UNIVERSIDAD INTERNACIONAL MENÉNDEZ PELAYO
Científico del IRB aboga por usar biomarcadores en sangre para tratar las metástasis
JANO.es · 08 julio 2015
Eduard Batlle, premio Blanco Sabadell 2014 de Investigación Biomédica, también ha defendido el uso de la molécula TGF-beta en lugar de la estratificación de riesgos para la predicción de reincidencias en cánceres como el colorrectal.
El investigador del Instituto de Investigación Biomédica (IRB) de Barcelona Eduard Batlle abogó ayer en Santander por usar biomarcadores en sangre para elegir las mejores terapias en los casos de metástasis en cánceres porque "es muy complicado biopsiar una metástasis", si bien reconoció que esta elección terapéutica es "muy complicada".
Durante su intervención en una mesa redonda de la 'XVI Escuela de Biología Molecular 'Eladio Viñuela'. Biomedicina y Biotecnología en la era genómica', que se está celebrando esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), aseguró que la estrategia futura para elegir estas terapias "sería ir a por biomarcadores en sangre".
Batlle, premio Banco Sabadell 2014 de Investigación Biomédica por sus investigaciones en células madre y cáncer, también defendió el uso de la molécula TGF-beta en lugar de la estratificación de riesgos -bajo, medio y alto- para la predicción de reincidencias en cánceres como el colorrectal.
"La estratificación de los riesgos en bajo, medio y alto es algo complicado. No hay que establecer grupos porque a más TFG-beta, más riesgo (de que haya reincidencia)", explicó, en relación con los resultados de una investigación del IRB hecha pública en febrero de este año, según la cual investigadores de este instituto habían desarrollado un sistema de predicción de recaída de los pacientes con cáncer de colon mediante el análisis de las células que rodean el tumor, el estroma.
De esta forma, ha detallado que según los tests del IRB "un 20% de los pacientes están a riesgo virtualmente cero de recaer en los estadios 2 y 3". Igualmente, ha concretado que un 50% de entre el 20% y un 30% de los pacientes con metástasis localizada en casos de cáncer colorrectal recae, un dato obtenido gracias al test de diagnóstico desarrollado por IRB porque la molécula TGF-beta "predice mucho" qué pacientes van a recaer estudiando el tumor primario. Por ello, ha incidido en la necesidad de desarrollar inhibidores de esta molécula.