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En España se registraron, durante el 2010, un total de 1.502 donantes de órganos, lo que sitúa la tasa de donación en 32 donantes por millón de habitantes (p.m.p.), frente a los 34,4 registrados en 2009. Estas cifras han permitido realizar un total de 3.773 trasplantes: 2.225 de riñón, 971 de hígado, 235 de corazón, 243 de pulmón, 94 de páncreas y 5 de intestino.

Así se expuso ayer durante la presentación del balance de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) correspondiente a 2010, durante la cual el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, comentó que esta reducción responde a una tendencia y se ajusta al perfil cambiante de la población española en los últimos años. “Pero seguimos teniendo las cifras de donación más altas del mundo, muy por encima de las de la Unión Europea, Estados Unidos y otras zonas del mundo. Además, España registra máximos históricos en trasplante pulmonar, trasplante renal de donante vivo y en aquellos que proceden de donantes en asistolia, de acuerdo con los objetivos de la ONT”, afirmó Martínez Olmos.

En cuanto a las razones que pueden explicar este descenso, Martínez Olmos señaló, por un lado, la disminución de muertes encefálicas y, por tanto, de las personas que pueden ser donantes de órganos tras su fallecimiento en una UVI; y, por otro, el importante descenso registrado en la siniestralidad vial. Según los datos de la ONT, en 2010, los donantes procedentes de accidentes de tráfico representaron un 5,7% del total, frente al 8,3% registrado en 2009.

En cuanto a la incidencia de esta disminución de donantes en las listas de espera, el director de la ONT, Rafael Matesanz, señaló que éstas se mantienen bastante estables en términos absolutos, situándose entre las 5.500 y las 5.700 personas. “Los tiempos medios de espera para un trasplante de hígado se sitúan en torno a los cuatro meses; de pulmón, entre cinco y seis meses; de corazón, entre mes y medio y dos meses, y en el caso del trasplante renal, el período es de entre 20 y 24 meses”, dijo Matesanz.

Así mismo, el director de la ONT destacó el hecho de que durante el año pasado se había generalizado en toda España la modalidad de donante vivo, que ya se practica en 30 hospitales de 14 comunidades autónomas. Con ello, se han alcanzado los 240 trasplantes renales de vivo, lo que significa un 10,7% del total.

Otro de los aspectos destacados por el doctor Matesanz ha sido el papel de los donantes “altruistas”, esto es, voluntarios que ofrecen algunos de sus órganos en vida no a un familiar o conocido, sino al paciente de la lista de espera al que más pueda beneficiar. “Se trata de un total de 22 personas, con un perfil muy variado respecto a edad, sexo y procedencia. Aún no se ha intervenido a ninguno, pero tenemos previsto llevar a cabo en los primeros meses de este año intervenciones en cadena, para optimizar el proceso”.

Respecto a la edad de los donantes, y al igual que en años anteriores, durante 2010 el 46,6% de las donaciones se registraron entre personas mayores de 60 años, experimentándose un incremento de 2 años en la edad media del donante, que se sitúa en 56,5 años. Por comunidades autónomas, el ranking de donaciones lo encabeza Cantabria (44,1 donantes p.m.p.), La Rioja (43,8); País Vasco (42,2) y Castilla y León (40,2).

En cuanto a los hospitales españoles en los que se registró una mayor actividad de donación y trasplante durante 2010, se sitúa en primer lugar el Doce de Octubre, de Madrid, seguido del Clínico San Carlos, de Madrid y el Hospital Central, de Asturias.