SIDA
JANO.es y agencias · 09 julio 2010
El hallazgo abre una vía al diseño de vacunas contra el virus o al desarrollo de tratamientos para prevenir o tratar su infección.
Científicos del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID), de Estados Unidos, han descubierto dos potentes anticuerpos humanos que pueden frenar a más del 90% de las cepas de VIH de células humanas infectadas en el laboratorio y han demostrado cómo una de estas proteínas consigue este reto. Este hallazgo, realizado por el equipo de científicos dirigido por Peter D. Kwong, John R. Mascola y Gary J. Nabel, se publicó ayer jueves en la edición online de Science.
Según los investigadores, estos anticuerpos podrían ser usados para diseñar vacunas contra el VIH o desarrollar tratamientos para prevenir o tratar la infección por VIH. Además, el método empleado para realizar este hallazgo podría aplicarse a anticuerpos terapéuticos aislados, también en otras infecciones.
"El descubrimiento de estos anticuerpos con un excepcionalmente amplio poder neutralizador para el VIH y el análisis estructural que explica cómo funcionan son emocionantes avances que podrían acelerar nuestros esfuerzos para encontrar una vacuna preventiva contra el VIH de uso global", afirma el director del NIAID, Anthony S. Fauci.
Los neutralizadores más potentes
Dirigido por un equipo del Centro de Investigación de Vacunas (VRC) del NIAID, estos científicos encontraron dos poderosos anticuerpos -denominados VRC01 y VRC02- que coincidían de forma natural en la sangre del individuo infectado de VIH. Hallaron estos anticuerpos después de desarrollar un dispositivo molecular que se dirige a células específicas que fabrican anticuerpos contra el virus del VIH.
Descubrieron que el VRC01 y el VRC02 neutralizan más cepas del VIH, con la mayor potencia conocida en un anticuerpo contra este virus. Asimismo, determinaron la estructura atómica del VRC01 cuando está 'enganchado' al VIH. Esto permitió al equipo definir cómo trabajan los anticuerpos y precisar la ubicación en la que se 'agarran' al virus.
A partir de este conocimiento, los investigadores han comenzado a diseñar compuestos candidatos a convertirse en vacunas que puedan enseñar al sistema inmune humano a fabricar anticuerpos similares al VRC01, que puedan prevenir infecciones para una gran mayoría para las cepas del virus del VIH en todo el mundo.
Encontrar anticuerpos individuales que puedan neutralizar las cepas del VIH en cualquier parte del mundo no ha sido fácil, pues el virus cambia continuamente las proteínas de su superficie para evitar ser reconocido por el sistema inmune.
Como consecuencia de estos cambios, existe un gran número de variantes del virus VIH. Sin embargo, los científicos han identificado varias áreas de la superficie de este virus que se mantienen casi constantes en todas las variantes. Una de esas áreas, localizada en parte de la superficie usada para 'engancharse' a las células del sistema inmune e infectarlas, se denomina CD4. El VRC01 y el VRC02 bloquean la infección por VIH 'agarrándose' al CD4 y previniendo que el virus se 'enganche' a las células inmunes.