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El consumo de chicle sin azúcar ayuda a reducir el consumo de calorías en las comidas y aumenta el gasto energético, según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Rhode Island (Estados Unidos) y presentado en el marco de la Reunión Anual de la Sociedad para la Obesidad de Estados Unidos se está celebrando en la ciudad de Washington (Estados Unidos).

 

Los participantes en el estudio masticaban chicle por la mañana y su consumo energético en la comida disminuía en 68 calorías. Sin embargo, y a pesar de que ingerían menos calorías, los participantes no tenían más hambre y no compensaban las calorías perdidas en comidas posteriores. Además, cuando los participantes tomaban chicle decían sentir menos hambre en comparación con cuando no lo tomaban.

 

Los resultados también mostraron que si se masticaba chicle de forma relajada, a un ritmo natural antes y después de comer, el gasto energético aumentaba. Cuando los participantes masticaban chicle antes de comer, su gasto de energía aumentaba en un 5% en comparación con cuando no masticaban chicle. Además, los sujetos aducían que masticar chicle reducía su decaimiento y les costaba menos trabaja realizar sus tareas, en comparación con no comer chicle.

 

En conjunto, el estudio demuestra los efectos de masticar chicle sin azúcar sobre el consumo en la comida y el gasto energético, de tal forma que en medio día se puede evitar el consumo de 68 calorías al masticar chicle de forma relajada durante una hora en comparación con no tomar chicle.

 

Además, según los autores los resultados vienen a confirmar las evidencias de tres estudios previos que apuntaban que masticar chicle antes de comer ayuda a reducir el hambre, disminuía el deseo de comer y reducía la cantidad de comida que se ingiere entre horas.