ATENCIÓN PRIMARIA
JANO.es · 23 febrero 2012
Presentado el curso 'Habilidades en entrevista clínica', basado en la resolución de situaciones clínicas frecuentes en atención primaria, con el objetivo de incrementar las habilidades de entrevista del médico.
El 16% de los pacientes que se atienden en atención primaria padecen depresión, una enfermedad que, no obstante, acumula un porcentaje de infradiagnóstico que oscila el 20% y el 50%. En este contexto, Laboratorios Servier ha organizado el curso ‘Habilidades en entrevista clínica: depresión’, para el que ha contado con el aval de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen).
Según explica el Dr. Luis Agüera, del Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario 12 de Octubre y director del curso, “los problemas que impiden el correcto diagnóstico del tratamiento de la depresión pueden ser múltiples”.
“Las habilidades de entrevista con el paciente, el diagnóstico o la elección del fármaco adecuado en un marco siempre escaso de tiempo, son determinantes para garantizar una recuperación de calidad. En este contexto, una adecuada técnica de entrevista resulta fundamental. La depresión tiene un componente biológico claro, y en la mayor parte de los casos requiere un tratamiento farmacológico. La aparición de nuevos fármacos nos obliga a los profesionales a actualizarnos sistemáticamente. Es el caso de Agomelatina, que añade nuevos elementos al tratamiento de la depresión, ya que por su mecanismo de acción completamente distinto actúa resincronizando los ritmos circadianos, alterados en la depresión, y aumentando la liberación de catecolamina”, subraya el Dr. Agüera.
El curso de Servier se compone de un módulo presencial para la adquisición de habilidades en entrevista clínica y un módulo on line, con resolución de casos clínicos.
En palabras del Dr. Agüera, las características de una buena entrevista clínica a un paciente con depresión pueden resumirse en: 1) realizar una primera parte de forma no directiva y con preguntas abiertas; 2) continuar de forma más directiva para completar la información; 3) atender al lenguaje no verbal del paciente; 4) hacer que el paciente perciba, mediante nuestro lenguaje verbal y no verbal, que él es el centro de nuestra atención, a pesar de impedimentos como el ordenador o las posibles interrupciones; y 5) cerrar la entrevista con una conclusión y la explicación de los siguientes pasos a tomar.
En la actualidad, se estima que más de 3,5 millones de españoles (el 5% de la población) sufre algún trastorno depresivo.