El Partido Popular (PP) ha presentado en el Congreso de los Diputados una proposición no de Ley por la que insta al Gobierno a impulsar, en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), el uso de tests estereoscópicos en las revisiones pediátricas periódicas de los niños de entre 3 y 6 años, con el objeto de diagnosticar precozmente la ambliopía o enfermedad del ojo vago, enfermedad que afecta a entre un 1,5 y un 3% de los españoles.

 

Según explica el grupo parlamentario popular en su propuesta, la pérdida de visión en un ojo por un defecto en la formación de la visión está relacionada con el diagnóstico precoz, de ahí la importancia de hacer un seguimiento de los niños antes de que cumplan los 6 años a través de estos tests de cribado, que permiten diferenciar a los niños ambliopes de los que no lo son para derivarlos al especialista y ser tratados con garantías de eficacia.

 

Entre los 6 y 8 años, la enfermedad sólo se resuelve en un 20% y, más tarde, el tratamiento ya no es eficaz, de modo que el adulto ambliope queda para el resto de su vida con visión monocular. En estos casos, el paciente corre más riesgo de quedar ciego en el caso de que, por accidente o enfermedad, pierda la visión de su único ojo funcional, al tiempo que también existen otros problemas de carácter psicológico y social relacionados con el autoestima, el trabajo, el fracaso escolar y las relaciones personales.

 

Además, la falta de binocularidad en estos pacientes les impide acceder a determinadas profesiones, como la de piloto u otras, en las que la visión en relieve es imprescindible, asegura el PP.

 

Las causas de la ambliopía son varias, pero las más prevalentes son la anisometropia (diferencia significativa de graduación entre ambos ojos) y el estrabismo (falta de paralelismo visual). Sin embargo, mientras que el estrabismo es fácilmente detectable, para el diagnóstico del ojo vago es necesaria la realización de un test específico dada "su naturaleza oculta".