APARATO DIGESTIVO
JANO.es · 10 febrero 2012
La Reunión de Pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal Crónica (EIIC), que se celebra este viernes en Madrid, aborda los avances en esta grupo de patologías.
La colitis ulcerosa dispone de nuevos fármacos y unidades monográficas dedicadas a la enfermedad, "que hacen que el paciente tenga más acceso a una atención médica especializada", señala la doctora María Dolores Martín Arranz, del servicio de Aparato Digestivo en el Hospital de La Paz de Madrid. Esta experta indica además que "bajo ningún concepto" el paciente debe suspender la medicación o automedicarse al sospechar que padece un brote.
La colitis ulcerosa será uno de los temas tratados en la 'Reunión de Pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal Crónica (EIIC)', que se celebra este viernes en Madrid, y que cuenta con la colaboración de Abbott.
Respecto a la enfermedad de Crohn, otro de los temas que se tratarán en el encuentro, Martín Arranz apunta que "lo más importante es una adecuada comprensión y aceptación de la enfermedad", y señala que la decisión de suspender o no el tratamiento tras un brote, "depende de la localización de la afectación, si bien en la mayoría de los casos es necesario seguir medicándose".
En relación con las terapias biológicas, esta experta subraya que han posibilitado un "mayor control" de los pacientes con brotes y han evitado los efectos secundarios a largo plazo y los ingresos y cirugías.
La enfermedad inflamatoria intestinal crónica engloba un conjunto de patologías, como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa que, como enfermedades autoinmunes, inflamatorias y crónicas, afectan al aparato digestivo. La principal diferencia entre ellas es el lugar de afectación del intestino. Mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar a todas las partes del aparato digestivo, desde la boca hasta el ano, la colitis ulcerosa causa problemas al intestino grueso.
Estas patologías afectan, en la actualidad, al 2% de la población mundial y a más de 2,2 millones de personas en Europa. En España se diagnostican cada año 2.000 nuevos casos.