XXIII SEMANA DE LA PREVENCIÓN DE LA ARTERIOESCLEROSIS Y ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES
En 2030 el 9,5% de los europeos tendrá diabetes, enfermedad que afecta ya al 8% de la población
JANO.es · 14 mayo 2014
Los problemas cardiovasculares constituyen aproximadamente el 65% de las causas de muerte entre los pacientes diabéticos.
Los expertos alertan de que el número de diabéticos aumentará en los próximos años hasta llegar al 9,5% de la población adulta europea, si bien el 8,1% ya padece actualmente esta enfermedad. En el ámbito español, y según explica la Dra. Aida Cadenas, del Servicio de Endocronología de IMQ, quien esta tarde pronunciará la conferencia 'Diabetes y Colesterol', que se enmarca en el programa de la XXIII Semana de la Prevención de la Arterioesclerosis y Enfermedades Cardiovasculares,“la salud cardiovascular de los vascos se está viendo afectada y perjudicada cada vez más por no llevar a la práctica unos hábitos de vida saludables, como evitar el consumo de alcohol y tabaco, hacer ejercicio moderado o cuidar la alimentación”, explica
“Cuando escuchamos la palabra diabetes", indica la Dra. Cadenas, "en la mayoría de los casos pensamos en glucemia exclusiva y simplificamos la enfermedad reduciéndola a un simple problema de cantidad de glucosa en sangre, pero la realidad es muy diferente. Aunque no es una enfermedad cardiovascular, sí es una patología cuyas complicaciones crónicas son vasculares, y que forma parte de los mayores factores de riesgo cardiovascular, la gran epidemia del mundo desarrollado en nuestros días."
Los problemas cardiovasculares constituyen aproximadamente el 65% de las causas de muerte entre los pacientes diabéticos. “Padecer diabetes aumenta en 2,4 veces el riesgo de fallecer por causas cardiovasculares, casi el mismo riesgo que haber tenido un infarto de miocardio previo”, alerta la doctora del IMQ.
Por ello, en el tratamiento de un paciente diabético no sólo debe hacerse hincapié en bajar las tasas de glucosa en sangre, sino también en el control de otros factores de riesgo modificables como el tabaco, la hipertensión arterial, la alteración de los lípidos sanguíneos (colesterol y triglicéridos), la Microalbuminuria y la obesidad.
A lo largo de la conferencia la doctora expondrá las pautas para modificar el estilo de vida de los pacientes, ya que asegura que son aspectos “especialmente importantes”. “El tabaco puede llegar a doblar la posibilidad de sufrir problemas cardiovasculares, y dejar de fumar reduce la mortalidad cardiovascular, por lo que deberíamos aconsejar a nuestros pacientes que cesen en este hábito y hacer lo posible para ayudarlo en la tarea”, asegura.
También es importante el tratamiento de la obesidad, ya que “habitualmente es uno de los campos en los que nos solemos encontrar mayores dificultades porque requiere un gran esfuerzo por parte del paciente. Aunque haya fármacos coadyuvantes, los pilares básicos siguen siendo una dieta hipocalórica equilibrada y el ejercicio físico mantenido”.