EPIDEMIOLOGÍA
JANO.es · 05 diciembre 2008
Publicado en "Gaceta Sanitaria", muestra, entre muchos otros datos, que las españolas de 14 a 24 años apenas utilizan el preservativo en sus relaciones de sexo oral y anal
El uso del preservativo en las prácticas bucogenitales y coito-anales es muy poco frecuente entre las jóvenes españolas de 14 a 24 años. Cerca del 80% reconoce no utilizarlo nunca con sus parejas ocasionales cuando mantienen relaciones de sexo oral, mientras que el 57% de las que tienen una pareja estable jamás lo emplea durante el coito anal. Cifras como estas demuestran que las adolescentes y jóvenes de nuestro país utilizan el condón fundamentalmente para evitar embarazos y no para prevenir infecciones de transmisión sexual (ITS).
Los resultados se desprenden de un estudio publicado en "Gaceta Sanitaria" en el que se describen los comportamientos y prácticas sexuales de los jóvenes españoles mediante un cuestionario cumplimentado por 2.171 chicos y chicas de 14 a 24 años de Galicia, Madrid y Andalucía. Aunque el porcentaje de jóvenes sexualmente activos es bastante similar en función del género (cerca del 66% en ambos casos reconoce haber mantenido relaciones sexuales en los últimos 6 meses), sí existen diferencias significativas entre chicos y chicas en el comportamiento sexual.
Por un lado, ellos practican el sexo anal en mayor proporción que las mujeres (un 13,9% frente a un 6%), en cambio ellas manifiestan tener un menor número de parejas que los chicos (el 81,4% sólo ha mantenido relaciones sexuales con una persona, mientras que la cifra se reduce al 53,6% en los hombres). Por otro lado, la frecuencia de coitos vaginales es más elevada en las chicas que en los chicos: un 28,3% lo practican varias veces al mes, frente al 21,5% de los varones.
El estudio, cuyo primer autor es José María Faílde, de la Universidad de Vigo, también muestra diferencias palpables entre géneros a la hora de utilizar el preservativo, sobre todo en las prácticas bucogenitales y coito-anales. Aunque el uso en ambos casos es bastante escaso entre los jóvenes, los chicos suelen utilizarlo con mayor frecuencia que las chicas.
El uso del preservativo se incrementa en ambos casos con las parejas ocasionales y en menores de 18 años, datos que también refuerzan la idea de que su utilización entre los jóvenes está más asociada a evitar embarazos indeseados que a la prevención del VIH/sida u otras ITS.