El consumo de complementos vitamínicos se debe hacer bajo prescripción de un profesional sanitario, ya que la realidad demuestra que existe un alto porcentaje de autoconsumo sin control, que, a dosis altas, puede tener efectos negativos para la salud. Así lo recomendó Carmen Pérez Rodrigo, nutricionista de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, en las Jornadas Hot Topics en Vitaminas y Salud, organizadas por la Universidad CEU San Pablo y el Instituto Tomás Pascual Sanz.

La nutricionista explicó que existen falsas creencias sobre las vitaminas, que se han construido verdades no cimentadas sobre bases científicas. Así, citó el ejemplo de la vitamina H3, sobre la cual no existen evidencias científicas que justifiquen los presuntos beneficios antienvejecimiento, o la falsa creencia de que tomar mucho jugo de naranja es útil para evitar un resfriado. Para prevenirlo, señaló que lo mejor es una dieta sana y mantener las recomendaciones higiénicas básicas. En este sentido, subrayó la importancia de tomar cinco raciones al día de fruta y verdura.

En la jornada también intervinieron la profesora de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, Rosa Ortega, quien señaló que se desconocen las ingestas óptimas recomendadas de vitaminas y que las cantidades deben ser objeto de estudio y actualización permanente: "el aporte máximo debe ser estudiado y concreto en cada población, ya que no se puede extrapolar las conclusiones de otros países".

El catedrático de Nutrición de la Universidad CEU San Pablo y director del seminario, Gregorio Varela, clausuró las jornadas señalando que las vitaminas son el grupo de nutrientes que más puede cambiar según el proceso de elaboración de las comidas y citó la biotecnología como herramienta muy importante en la actualidad. La vicerrectora de investigación de la CEU USP, Elena Alonso, animó a los asistentes a seguir investigando sobre las vitaminas y a saber transmitir bien los resultados a la sociedad, para evitar falsas expectativas.