Viernes, 29 de Marzo del 2024

Últimas noticias

PUBLICADO EN 'ADVANCED SCIENCE'

Fabrican un corazón vivo a partir de una impresora en 3D y tejido humano

JANO.ES · 16 abril 2019

El avance, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Tel Aviv, abre vías hacia los trasplantes del futuro, sin depender de donantes ni riesgo de rechazo.

Investigadores de la Universidad de Tel Aviv han construido un corazón vivo que palpita utilizando tejido humano y una impresora 3D, en un avance que abre vías hacia los trasplantes del futuro, sin necesidad de depender de donantes ni riesgo de rechazo de los órganos trasplantados. Los científicos han presentado en rueda de prensa este corazón inerte del tamaño de una cereza inmerso en un líquido. "Es la primera vez que se imprime un corazón integralmente con sus células y sus vasos sanguíneos. Es la primera vez que se utiliza materia y células provenientes del paciente", ha señalado el profesor Tal Dvir, director del equipo de investigación.

El corazón "está completo, vivo y palpita" y ha sido hecho con "células y biomateriales que vienen del propio paciente. Tomamos una pequeña biopsia de tejido graso del paciente, quitamos todas las células y las separamos del colágeno y otros biomateriales, las reprogramamos para que sean células madre y luego las diferenciamos para que sean células cardiacas y células de vasos sanguíneos", añade el investigador. Después, se procesan los biomateriales "para convertirlos en bio-tinta, que permitirá imprimir con las células".

El producto resultante, un corazón de unos tres centímetros, equivalente al tamaño de una rata o un conejo, "todavía es muy básico", señala el profesor, para quién "el próximo paso es madurar este corazón de modo que pueda bombear". Por el momento, "las células se pueden contraer, pero el corazón completo no bombea. Necesitamos desarrollarlo más" para lograr un órgano que pueda trasplantarse a un ser humano, considera Dvir.

Como argumentaba este experto, "ya se ha conseguido imprimir la estructura de un corazón en tres dimensiones antes, pero no con células y vasos sanguíneos". Pese a ello, los científicos estiman que habrá que superar muchos obstáculos antes de que estos corazones en 3D puedan usarse en los trasplantes. El trabajo de este equipo de investigadores israelíes ha sido publicado por la revista Advanced Science.

"El próximo reto es madurar estas células y ayudarlas a que se comuniquen entre ellas, de forma que se contraigan juntas. Hay que enseñar a las células a comportarse adecuadamente. Y después tendremos otro reto, lograr desarrollar un corazon más grande, con más células. Tenemos que descubrir cómo crear suficientes células para producir un corazón humano", reflexionaba Dvir.

El desafío de los científicos ahora es conseguir que estos corazones impresos "se comporten" como los de verdad y entonces podrán ser trasplantados a modelos animales, según cuenta Dvir. "Quizás en 10 años haya impresoras de órganos en los mejores hospitales del mundo y estos procesos se lleven a cabo de modo rutinario", vaticinaba en la rueda de prensa, aunque su impresión es que se empezará con órganos más simples que el corazón. Dvir tiene la esperanza de que "en diez o quince años tengamos impresoras 3D en hospitales, que provean de tejido para los pacientes. Quizás, corazones".

Copyright © 2024 Elsevier Este sitio web usa cookies. Para saber más acerca de nuestra política de cookies, visite esta página

Términos y condiciones   Politica de privacidad   Publicidad

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?