EPIDEMIOLOGÍA
JANO.es · 09 agosto 2010
Un artículo aparecido en The Lancet Oncology muestra la mayor incidencia de este tipo de cáncer entre los infectados por el virus de la hepatitis B
Las personas infectadas con el virus de la hepatitis B son casi dos veces más propensas a desarrollar un linfoma no-Hodgkin, según ha determinado un estudio del Instituto Nacional de Cáncer y de la Universidad de Yonsei en Seúl, publicado en The Lancet Oncology.
Según explican los autores, anteriormente se sabía que la hepatitis B puede ser la causa de desarrollar un cáncer hepático y, además, algunos científicos ya sospechaban que también podía provocar linfoma.
Los expertos han indicado que este cáncer no es común y que la vacunación masiva contra el virus de la hepatitis B no afectaría a las tasas de linfoma no-Hodgkin. Asimismo han señalado que, no obstante, el tratamiento de la hepatitis B puede ayudar a los pacientes con linfoma.
El estudio afirma que tanto la hepatitis B como la C podrían causar linfoma al estimular en exceso el sistema inmunitario, que intenta combatir la infección hepática.
En la investigación, dirigida por los Dres. Eric Engels y Sun Ha Jee, se analizaron registros de más de 600.000 personas de Corea del Sur, donde la hepatitis B era extremadamente común antes de que comenzara la campaña de vacunación en 1995.
Del total, unos 53.000 pacientes, alrededor del 9%, presentaban evidencia de infección por hepatitis B. Después de 14 años, las tasas de linfoma no-Hodgkin eran más frecuentes entre las personas infectadas: 19,4 frente a 12,3 casos por cada 100.000 personas entre los pacientes sin el virus.