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El Comité de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado esta mañana su decisión de mantener la alerta de pandemia de la gripe A, un año después de su entrada en vigor y de la adopción de medidas sanitarias excepcionales en todo el mundo para controlar su propagación, según informa elMundo.es.

A pesar de que los niveles del virus han descendido en la mayor parte de los países, el organismo internacional considera que podrían producirse nuevas oleadas para las cuales los estados deberán estar preparados. De momento, la alerta se mantiene, aunque el Comité de Emergencia volverá a reunirse a mediados de julio para evaluar de nuevo la situación "cuando ya esté disponible la información sobre la estación invernal de gripe del hemisferio Sur", según ha anunciado la directora general de la OMS, Margaret Chan.

La decisión se ha anunciado tras la reunión que mantuvo dicho Comité de Emergencia el pasado día 1 de junio. Para el Comité, "desde una perspectiva global, aunque continúa la pandemia, el período de actividad más intensa parece haber pasado en muchas partes del mundo". Sin embargo, agregaron que "sigue siendo crítico que los países mantengan la vigilancia respecto a la pandemia".

"Se prevé que el H1N1 continúe siendo el principal virus de la gripe durante algún tiempo", ha declarado Gregory Hartl, portavoz de la OMS.

El virus AH1N1 ha provocado, en poco más de trece meses, unas 18.000 muertes confirmadas por pruebas de laboratorio, frente a las 500.000 muertes anuales que se atribuyen a la gripe estacional. En la actualidad, el virus es más activo en algunas partes del Caribe y el Sudeste asiático, así como en ciertas zonas de Chile.