VACUNAS
La OMS no confía en el desarrollo de una vacuna esterilizante que evite al 100 por cien las infecciones por el SARS-CoV-2
OMS · 25 enero 2022
En cualquier caso, según la experta Kate O'Brien, las siguientes generaciones de vacunas contra la COVID-19 sí que podrían mejorar en gran medida mucho a las actuales.
La directora del Departamento de Inmunización, Vacunas y Productos Biológicos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Kate O'Brien, no confía en que se desarrolle una vacuna contra la COVID-19 que produzca inmunidad esterilizante y evite todas las infecciones por el coronavirus SARS-CoV-2.
"No creo que debamos tener la expectativa de que haya alguna vacuna que proporcione inmunidad esterilizante. Es una tarea muy difícil para una vacuna", declaró O'Brien durante una sesión informativa ayer lunes en el marco de la 150ª reunión del Consejo Ejecutivo de la OMS.
En cualquier caso, esta experta apuntó que las siguientes generaciones de vacunas contra la COVID-19 sí que podrían mejorar en gran medida a las actuales. "Sí creo que podemos tener una expectativa de que las vacunas tendrán un mejor rendimiento contra la infección y, por tanto, contra la transmisión, pero realmente tendremos que ver lo que las vacunas pueden hacer", manifestó.
Asimismo, consideró que podrían ayudar no solo a la lucha contra la COVID-19, sino contra otros coronavirus en general. "Los beneficios potenciales de una vacuna de segunda generación podrían ser no solo con respecto a esta pandemia en particular, sino un conjunto más amplio de competencias para esas vacunas", detalló.
Por su parte, el director ejecutivo del Programa de Emergencias de la OMS, Mike Ryan, recordó que las vacunas actuales se desarrollaron "para proteger contra la enfermedad grave, la hospitalización y la muerte".
"En ese sentido, estas vacunas tienen un rendimiento excelente –comentó-. Han cambiado las reglas del juego, pero todos querríamos una vacuna que diera inmunidad esterilizante durante un periodo prolongado, que fuera eficaz contra múltiples variantes, etc. Ese es realmente el unicornio que todos buscamos, el reto de las vacunas de segunda y tercera generación".
Respecto al futuro, Ryan consideró que se podrían administrar diferentes vacunas en función de la edad o del riesgo frente a la COVID-19. "Yo diría que cuando hablamos de dosis de refuerzo ahora, creo que dentro de 6 meses o de un año podemos estar hablando de diferentes cursos primarios para diferentes grupos de riesgo, y del número de dosis necesarias para provocar una respuesta protectora a largo plazo", puntualizó.