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La Organización Mundial de la Salud (OMS) no considera necesario aplicar una prohibición sobre las importaciones de productos lácteos chinos, ya que carece de informes que demuestren que los niños del país hayan enfermado por el consumo de leche en polvo contaminada.

 

China prometió ayer detener la llegada de la leche adulterada a los mercados importadores y exportadores, mientras aumenta la lista de países que prohibieron o retiraron las importaciones lácteas provenientes del gigante asiático.

 

Sin embargo, la OMS considera que las autoridades de los países importadores deberían analizar exhaustivamente los productos lácteos de China para detectar cualquier posible contaminación. En palabras de Danilo Lo Fo Wong, científico de la división de seguridad alimentaria de la OMS. “no tenemos informes de niños con insuficiencia o cálculos renales en otros países. Desde luego que la OMS está preocupada por la salud del público de todos los estados miembros, pero no recomienda prohibir todos los productos lácteos chinos, al menos no en este momento”.

 

Más de 13.000 niños han ingresado a hospitales chinos en los últimos días tras consumir leche en polvo contaminada con melamina, entre ellos 104 en estado grave, con cálculos renales y complicaciones serias. Hasta el momento se ha confirmado la muerte de cuatro pequeños.

 

Sin embargo, “no está claro aún –apuntó Wong– si la crisis china ya ha alcanzado su máxima intensidad o si crecerá más a medida que los padres de las zonas rurales logran llevar a sus hijos para que se les realicen los controles médicos necesarios para descartar daños en la salud”.

 

Pekín está trabajando con la OMS para determinar cuántos niños habrían estado expuestos a la leche contaminada y para asegurar que todos los productos adulterados sean retirados del mercado, indicó el funcionario de la agencia de la ONU. De hecho, dos compañías chinas exportaron sus productos lácteos a cinco países (Bangladesh, Burundi, Myanmar, Gabón y Yemen), pero el Gobierno ordenó la retirada, pese a que la contaminación en esas exportaciones aún no está confirmada, señaló la OMS en su página en internet.

 

   No obstante, otras naciones también informaron haber encontrado rastros de melamina en productos lácteos fabricados en China, agregó la OMS. Los países "deberían ser conscientes de la posible distribución de productos contaminados a través de canales formales o informales, debido a las grandes cantidades involucradas y la gravedad de las consecuencias para la salud pública", manifestó la entidad.