ALERGOLOGÍA PEDIÁTRICA
La SEICAP denuncia la falta de alergólogos pediátricos en los hospitales españoles
JANO.es · 21 mayo 2013
En las provincias que carecen de servicio especializado de alergología pediátrica, los niños son tratados por médicos de adultos.
La mayoría de los hospitales españoles no cuenta con servicios especializados de alergología pediátrica, según ha denunciado la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergia y Asma Pediátrica (SEICAP) que la pasada semana celebró su XXXVII Congreso Nacional en Ávila. Tal como explica Marcel Íbero, presidente de la SEICAP, "entre un 15 y un 20% de los niños españoles tienen al menos una alergia y no todos los centros tienen un alergólogo pediátrico para proporcionarles el diagnóstico y tratamiento adecuado a la formación de un pediatra".
"Hay muy pocos Servicios de Alergia Pediátrica de alto nivel, ubicados en Hospitales de nivel 3, que se encuentran concentrados en ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Pamplona y Málaga", asegura este especialista. "En otras capitales de provincia encontramos Unidades de Alergia Pediátrica ubicadas dentro del Servicio de Pediatría, la mayoría de ellas con dotación precaria de personal y medios. Y tenemos algunas comunidades autónomas (Castilla y León, Castilla La Mancha, Andalucía, Extremadura...) sin Unidades de Alergia Pediátrica en algunas de sus capitales de provincia”, añade. Hay que tener en cuenta que “los conocimientos sobre la población infantil que tiene un pediatra con la especialidad de alergología van a permitir mayor eficacia y acierto en el diagnóstico y tratamiento de una enfermedad alérgica en el niño”, indica.
Como consecuencia, prosigue el presidente de SEICAP, los hospitales que sí cuentan con servicios especializados “están desbordados debido al aumento progresivo del número de niños con alergias". En este sentido, el doctor José María Maíllo, presidente del comité organizador del XXXVII Congreso de SEICAP, indica que se necesita un alergólogo pediátrico por cada 50.000 a 100.000 niños advierte. El principal problema, señala este alergólogo pediátrico, es que “deberían existir las subespecialidades pediátricas. Cada vez más profesionales estudian también alergología pero no hay plazas para ellos”.
Diagnóstico tardío
Por su parte, Pilar Muñoz González, presidenta de la Asociación Española de Alérgicos a Alimentos y Látex (AEPNAA), cree que debido a la falta de alergólogos pediátricos “el tiempo que pasa entre que el niño visita al pediatra y después llega a la consulta del especialista es muy largo, con lo que el diagnóstico tarda mucho en llegar”.
En el caso de las alergias alimentarias y al látex, es más complicado pues no siempre comportan una reacción respiratoria. “Los niños que sufren reacciones alérgicas por un alimento, sobre todo por ingestión o contacto lo tienen todavía más complicado sobre todo cuando las reacciones son digestivas o sistémicas, porque los pediatras en principio en muchos casos suelen tomarlo como una reacción adversa. Por lo que lo envían al gastroenterólogo y/o a otros especialistas hasta que finalmente se llega al alergólogo pediátrico”, añade la presidenta de AEPNAA.