ONCOLOGÍA
Las células sanas que rodean a las malignas boicotean la terapia oncológica
JANO.es · 09 julio 2012
Dos investigaciones paralelas revelan que las sustancias que secretan las células ilesas son la causa por la que los tumores se vuelven resistentes a los fármacos.
Uno de los principales obstáculos a los que se enfrentan las terapias anticancerígenas es la resistencia del tumor al tratamiento. Dos estudios independientes publicados en Nature demuestran que las células sanas que rodean un tumor, el ‘microambiente tumoral’, secretan unas sustancias llamadas ‘factores de crecimiento’ que están en el origen de esta resistencia a la medicación.
El equipo de Ravid Straussman, autor principal de uno de los trabajos e investigador del Instituto Broad, de Massachusetts (Estados Unidos), partió del hecho de que, a menudo, los fármacos son muy eficientes eliminando las células cancerígenas en condiciones de laboratorio, pero sólo funcionan de manera parcial en los pacientes.
“En un sistema in vitro cultivamos células tumorales aisladas por un lado y células tumorales junto con algunas normales por otro para simular las condiciones reales del tumor”, explica a SINC Straussman.
El grupo analizó más de 500 sustancias secretadas por las células normales y encontró que una de ellas, el Factor de Crecimiento Hepatocítico (HGF, por sus siglas en inglés), “provoca que las células tumorales muten y se vuelvan resistentes a los fármacos (los inhibidores de BRAF) que se utilizan para tratar una variedad de cáncer de piel, el melanoma”, cuenta el investigador.
Los investigadores comprobaron si los pacientes con melanoma tenían este HGF y lo hallaron en el 68% de los casos. “Los enfermos con altos niveles de esta molécula son más resistentes a las terapias anticancerígenas”, señalan.
En la actualidad, hay varias moléculas inhibidoras de HGF en desarrollo clínico, por lo que los científicos esperan que los resultados “pueden tener aplicación inmediata en algunos casos de melanoma”.
La influencia del entorno
En la segunda investigación se han llegado a resultados parecidos mediante otra metodología. “Cada vez está más claro que las células cancerígenas reciben señales del entorno que les permiten mantener el fenotipo maligno además de las señales oncogénicas de sus propias mutaciones”, cuenta a SINC Antoni Ribas, investigador de la Universidad de California (Estados Unidos), que ha participado en ambos estudios.
Las mutaciones de las células tumorales que han encontrado ambos equipos y que las hacen resistentes a los fármacos no son exclusivas de pacientes con melanoma; también son características de otros tipos de cáncer, como el de colon y el glioblastoma (un tipo de tumor cerebral).
No es la primera vez que los científicos buscan respuestas en el ‘microambiente tumoral’. “Llevamos más de cuatro años investigando y ya hemos descubierto varios de los mecanismos de resistencia que se dan en las células tumorales, pero hemos de seguir trabajando para entender cómo el cáncer intenta sobrevivir”, concluye Ribas.