ONCOLOGÍA
JANO.es · 28 enero 2009
El VPH es muy frecuente y persiste por más tiempo cuando las mujeres están coinfectadas por el VIH
De acuerdo con los resultados de un estudio llevado a cabo por investigadores del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona) y publicado en el último número de la revista JAIDS, el virus del papiloma humano (VPH) es muy frecuente y persiste más tiempo en las mujeres infectadas por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) que en las no infectadas, explicando así el mayor riesgo de padecer cáncer de cuello de útero que presentan las seropositivas.
En la población general, la infección por VPH es muy común, pero en nueve de cada diez casos ésta desaparece antes de un año. Sin embargo, en mujeres infectadas por VIH es más difícil de eliminar y, según el estudio, persiste más de tres años en la mitad de las mujeres VIH positivas coinfectadas.
Para llevar a cabo su estudio, los investigadores contaron con la participación de 93 pacientes infectadas por el VIH sin antecedentes de patología de cáncer de útero. Así, y y con objeto de detectar infección por VPH, los investigadores utilizaron dos técnicas diagnósticas diferentes: la captura híbrida de segunda generación (HC-2) y PCR multiplex (mPCR).
Las dos técnicas ofrecieron resultados diferentes. La primera detectó un 47% de pacientes infectadas por virus del papiloma oncogénicos, mientras la segunda, más precisa y mayor, detectó el 63%. Los resultados en relación con la predicción de lesiones avanzadas fueron similares en ambos trabajos.
Serotipos no incluidos en las vacunas
El estudio mostró la presencia de un número elevado de pacientes infectadas por cepas del VPH de riesgo oncogénico diferentes de las que se incluyen en las vacunas preventivas comercializadas. En consecuencia, como indicó el Dr. Guillem Sirera, coordinador del estudio, “en aras de evaluar la efectividad de las futuras estrategias de vacunación contra el VPH en la población con VIH, se hace necesario tener en cuenta la presencia de un número elevado de genotipos altamente oncogénicos diferentes del 16 y el 18, ésto es, de los incluidos en las vacunas comercializadas”.
Es más; como apuntó el Dr. Sirera, “pese a la puesta en marcha de campañas de vacunación contra el VPH, se tienen que continuar llevando a cabo programas de cribaje, dado que la presencia de cepas de alto riesgo oncogénico no incluidas en la vacunación es elevada”.
Existen más de 100 tipos diferentes de VPH, de los que una treintena se trasmiten por contacto sexual. De éstas, algunas cepas están asociadas a la aparición de diversas afecciones tumorales, especialmente de cáncer de cuello de útero en mujeres, pero también de cáncer anal y de boca tanto en varones como en mujeres.