CIRUGÍA PLÁSTICA, ESTÉTICA Y REPARADORA
Médicos españoles reconstruyen la nariz de una niña a partir del cartílago y piel de su oreja
JANO.es · 07 enero 2015
La niña, que fue intervenida hace unos meses y cuya evolución ha resultado un éxito, carecía de columela (la parte que se extiende desde la punta de la nariz al labio) debido a una infección por estreptococo.
Cirujanos del Hospital Universitario de La Ribera de Valencia han reconstruido la nariz de una niña de 7 años mediante una técnica de microcirugía en la que se ha utilizado cartílago y piel de la oreja y vasos venosos y arteriales de la propia paciente, según ha informado el centro hospitalario en un comunicado.
La niña, que fue intervenida hace unos meses y cuya evolución ha resultado un éxito, sufría una grave deformación debida a una infección por estreptococo. La bactería la había dejado sin columela, es decir, sin la parte que se extiende desde la punta de la nariz al labio y que se encarga de separar los dos orificios nasales.
Tal como explica el jefe del Servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva del Hospital Universitario de La Ribera, el doctor José Mallent, la estructura que había que reconstruir, la columela, se caracteriza por tener piel y cartílago, por lo que era necesario una estructura similar que permitiera reconstruir su nariz, "produciéndole además el menor daño posible". "Y esto lo encontramos en el hélix, el pliegue que rodea el borde de la oreja", ha señalado.
El Dr. Mallent señala, asimismo, que se ha tenido que dotar a este implante de flujo sanguíneo para garantizar su supervivencia, lo que se realizó utilizando una rama de la arteria femoral de la paciente para crear un circuito sanguíneo desde el ángulo de la mandíbula hasta la aleta nasal a través de uno de los surcos nasogenianos (los surcos que aparecen a ambos lados de la nariz y la boca) de la niña.
7 horas de intervención
La intervención duró 7 horas y en ella participó todo el equipo del Servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva del Hospital Universitario de La Ribera, compuesto por los doctores José Mallent, Giovanni Bistoni y Alessio Becchetti, junto a miembros del Servicio de Anestesia y dos equipos de Enfermería.
El doctor Mallent destaca la "elevada dificultad técnica de la intervención, ya que nos encontrábamos limitados por la edad de la paciente, que, al ser una niña, tiene estructuras más pequeñas y venas y arterias más finas que un adulto, y por las cicatrices en la nariz y el labio superior que le había dejado la infección".
Tras cuatro días ingresada en el centro hospitalario, y tras otra intervención posterior de revisión, el colgajo "ha evolucionado perfectamente, generando su propia red de vasos y arterias locales". Al mismo tiempo, se ha prevenido la deformidad a la que habría dado lugar el crecimiento de la nariz sin que se hubiera realizado la intervención.