HIPERTENSIÓN

Novartis lanza el antihipertensivo Exforge

JANO.es · 23 abril 2008

Es una combinación del antagonista del calcio amlodipino y del antagonista de los receptores de la angiotensina valsartán

Ven la luz, por primera vez en castellano, los Cuadernos de Paul Valéry, libro insólito y extraordinario que recoge el pensamiento esencial de una de las más decisivas figuras de la modernidad cultural europea.

¿Qué lleva a un hombre, durante más de cincuenta años, a levantarse muy temprano –entre las 4 y las 5 de la madrugada– y a escribir entre tres ycuatro horas acerca de los temas más diversos? Se formula esta pregunta en el prólogo de la edición española su responsable, el poeta Andrés Sánchez Robayna, para concluir que mientras otros hacen libros, Valéry hace su mente y con ella va esculpiendo uno de los grandes iconos del pensamiento universal de la época.

La realidad es que al alba un hombre piensa, reflexiona, escribe, dibuja y lo hace con tal regularidad que se convierte en un hábito, en un vicio que tiene su raíz en una pertinaz, obsesiva voluntad de conocimiento.

Nacido en 1871, tras cursar derecho en Montpellier, Paul Valéry se instaló en 1894 en París, ciudad en la que moriría en 1945. Poeta en sus inicios, cultivó géneros literarios diversos y, a lo largo de más cincuenta años fue gestando esa deslumbrante obra que, publicada póstumamente entre1957 y 1961, causó asombro y suscitó el más profundo de los respetos. Son 29 volúmenes que recogen anotaciones de todo tipo. Las 26.000 páginas de este documento único y extraño –de las que en una amplia antología la versión española recoge 550 fundamentales–, abordan desde el dato autobiográfico hasta la fórmula matemática, pasando por la reflexión ética, la observación psicológica, el apunte filosófico, la interpretación histórica, la criptografía erótica, el dibujo, la caricatura o la disquisición política. En definitiva, un excepcional monumento a la inteligencia.