ONCOLOGÍA
JANO.es y agencias · 18 noviembre 2008
Un equipo español ha descubierto un mecanismo que controla los diversos efectos de esta vitamina sobre las células tumorales
Un equipo de investigadores que dirige Paloma Ordóñez, Morán del Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols, de la Universidad Autónoma de Madrid y del CSIC, ha descubierto un mecanismo que controla los diversos efectos de la vitamina D sobre las células tumorales de colon. Los resultados, que se publican en el "Journal of Cell Biology", ayudan a clarificar las acciones de una molécula que se encuentra en la actualidad en ensayos clínicos como terapia para el cáncer.
La vitamina D bloquea las células tumorales de colon de dos formas. Por un lado, activa genes, como el que codifica la E-cadherina, un componente de las uniones adhesivas que anclan a las células en las capas epiteliales. Por otro lado, la vitamina también induce los efectos necesarios sobre el citoesqueleto para la regulación genética y causar un cortocircuito en el mecanismo Wnt/b-catenina, que se encuentra activado en exceso en la mayoría de tumores de colon. El resultado global es detener la división y estimular que las células cancerígenas de colon se diferencien en células epiteliales que se aquietan en vez de expandirse.
Los investigadores dosificaron células de cáncer de colon con calcitrol, la versión metabólicamente activa de la vitamina D. El calcitrol desencadenó un incremento súbito de calcio en las células y la posterior activación de las moléculas reguladoras GTPasa RhoA, que han sido implicadas en los cambios del citoesqueleto celular que induce la vitamina D. A su vez, estas moléculas activaban uno de sus objetivos, la cinasa ROCK, que excitaba a otras dos cinasas.
Según los investigadores, cada paso de este mecanismo no genómico era necesario para estimular las respuestas genómicas. El equipo científico también concretó la contribución del receptor de la vitamina D (RVD). El receptor era crucial al inicio del mecanismo, donde permitía el influjo del calcio, y al final, al activar y reprimir genes.
El estudio es el primero en mostrar que los efectos genómicos y no genómicos se integran en la regulación de la fisiología celular. Una de las cuestiones que los investigadores quieren ahora analizar es si el receptor de la vitamina D en diferentes localizaciones de la célula, como el núcleo, el citosol y la membrana, tiene diferentes funciones en el mecanismo.