ONCOLOGÍA
JANO.es · 29 marzo 2010
La prueba cuantifica la probabilidad de que el tumor reaparezca antes de diez años y la posibilidad de que la paciente se beneficie de la quimioterapia.
El test de diagnóstico molecular de cáncer de mama Oncotype DX, de Genomic Health Inc., que permite personalizar la terapia adyuvante en las pacientes, acaba de ser presentado en España.
A través de una “tasa de recidiva”, el test cuantifica la probabilidad de que el tumor reaparezca antes de un plazo de diez años y la probabilidad de que la paciente se beneficie del tratamiento con quimioterapia. El test ha sido validado en más de 4.000 pacientes incluidas en ensayos clínicos y su aplicación facilita la toma de decisiones por parte del oncólogo, permitiendo una racionalización del uso de la quimioterapia y optimizando los resultados para las pacientes.
El test, disponible a partir del 1 de abril, fue presentado por Palex Medical, empresa especializada en la comercialización de equipos y productos sanitarios, con ocasión de la celebración en Barcelona de la European Breast Cancer Conference (EBCC).
El doctor Joan Albanell, jefe del Servicio de Oncología del Hospital del Mar de Barcelona, que participó en la presentación, coordinará un estudio que analizará el impacto que tiene esta prueba genómica en las decisiones terapéuticas. En este estudio se incluirán más de un centenar de pacientes de siete centros españoles.
Personalización del tratamiento
Existe evidencia clínica que indica que no todas las mujeres con cáncer de mama se benefician de igual modo del tratamiento con quimioterapia. Por ello, actualmente las líneas de investigación en cáncer están enfocadas a la búsqueda de dianas terapéuticas que permitan personalizar el tratamiento de las pacientes, reduciendo los posibles efectos secundarios y mejorando su calidad de vida.
En este contexto, Genomic Health desarrolló este test, que examina la expresión de 21 genes (16 relacionados con el cáncer y 5 genes control). El test resulta especialmente adecuado para mujeres con un diagnóstico reciente de cáncer de mama en estadios I y II, con presencia de receptores de estrógeno y ganglios negativos. También se ha validado para pacientes postmenopáusicas con ganglios positivos y receptores de estrógeno positivos.
Tanto la American Society of Clinical Oncology (ASCO) como la Nacional Comprehensive Cancer Network (NCCN) han incluido el uso de Oncotype DX en sus guías de recomendaciones. Además, recientemente el panel de consenso internacional de Sant Gallen ha recomendado la utilización de tests multigénicos validados para optimizar la toma de decisiones en estos pacientes.
Desde su aprobación en Estados Unidos en 2004, el test Oncotype DX ha sido solicitado por 8.000 médicos oncólogos y más de 135.000 pacientes de más de 55 países han recibido información proporcionada por el mismo. En el 31,5 % de los casos, el oncólogo ha decidido cambiar el tratamiento tras recibir los resultados del test. Por ejemplo, una “tasa de recidiva” baja obtenida con esta prueba indica que la paciente no se beneficia de quimioterapia, lo cual evita efectos adversos y reduce los costes del tratamiento. Por otro lado, en pacientes que, en principio, no parecen tener un alto riesgo de recidiva, el test puede indicar lo contrario e indicar la necesidad de quimioterapia. En cualquier caso, los estudios y las sociedades científicas tienen claros los beneficios de su utilización, tanto para las pacientes como para los oncólogos, al tiempo que permite una racionalización del gasto sanitario en tratamientos como la quimioterapia.