JORNADA ORGANIZADA POR ANIS Y ASSCAT

Tres de cada cuatro pacientes españoles con hepatitis C ignora que padece la enfermedad

JANO.es · 24 julio 2014

Experto prevén que en 2030 el 50% de estos enfermos serán, además, cirróticos.

El 75% de los pacientes españoles con hepatitis C no están diagnosticados y se calcula que en 2030 el 50% padecerá cirrosis, según ha informado este miércoles el médico del servicio de Aparato Digestivo del Hospital Virgen de la Salud de Toledo, Dr. Juan José Sánchez Ruano.

Sánchez Ruao se ha pronunciado así durante la jornada 'Hablando de la hepatitis C: aspectos generales de la enfermedad y perspectiva del paciente', organizada por la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) y la Asociación Catalana de Enfermeros de Hepatitis (ASSCAT), con motivo de la celebración, el próximo lunes, del día mundial de la enfermedad.

El experto ha advertido de que de todos los pacientes que a diario ve un médico de Atención Primaria, unos 40 están contagiados con este virus y "no lo saben". El principal problema de este desconocimiento es que cuando se detecta suele ser en las fases más graves de la patología.

De hecho, si bien los nuevos casos de contagio de hepatitis C han disminuido considerablemente desde 1990, actualmente se está produciendo un incremento del número de pacientes en fases muy avanzadas, con cirrosis en la mayoría de los casos. "Los enfermos con cirrosis van a ir aumentando y se cree que en unos 10 años el número de cirróticos descompensados se multiplique por 4", ha detallado el experto.

En este sentido, Sánchez Ruano ha explicado que los síntomas de la hepatitis C pueden tardar unos 30 años en aparecer aunque, durante ese tiempo, se producen lesiones hepáticas sin aviso y cuando aparecen los síntomas --fiebre, cansancio, pérdida de apetito, dolor abdominal, náuseas o ictericia-- suelen ser ya un signo de enfermedad hepática avanzada.

Por ello, el especialista en Aparato Digestivo del Virgen de la Salud ha destacado la necesidad de que las personas en riesgo de padecer hepatitis C se sometan a unos "sencillos" test para detectar o descartar esta patología. Así, ha recomendado que se sometan a esta prueba las personas que consumen o han consumido drogas por vía parental; los hemofílicos que recibieron factores de coagulación antes de 1987; los que tienen el VIH; los que están sometidos a hemodiálisis; los receptores de trasfusiones o trasplantes antes de julio de 1992; y los nacidos de madres con hepatitis C, entre otros.

Dicho esto, el especialista ha comentado que, una vez que una persona ha sido infectada con este virus, entre el 15 y el 25% de los casos desaparece espontáneamente durante la fase aguda de la enfermedad, sin precisar tratamiento, aunque, no obstante, el 75 o el 85% se suele volver una enfermedad crónica.

"El tratamiento depende del grado del daño hepático que tenga, de los genotipos de hepatitis C y de las características propias del paciente. Ahora bien, una vez tratado si a los 6 meses el virus ya no está en el paciente se puede casi asegurar que está totalmente curado", ha recalcado Sánchez Ruano.

Más apoyo emocional

Por otra parte, la paciente y voluntaria de ASSCAT, Josefa Cristófol, ha asegurado que muchas personas cuando son diagnosticadas de esta enfermedad tienen "ansiedad y miedo", debido a que todavía hay un "importante" estigma social y a que no se conoce cómo transcurre la enfermedad.

"Las preguntas más comunes son dónde, cuándo y cómo se han contagiado, y es importante que se olviden de ellas para asumir la enfermedad y plantarle cara", ha indicado Cristófol, para destacar la importancia que tiene que el paciente conozca lo "más rápidamente posible" a su hepatólogo porque éste será el que le informe bien de la enfermedad.

Dicho esto, ha comentado que "todos" los pacientes necesitan apoyo "emocional, información y educación" para poder enfrentarse a la enfermedad y ha solicitado al Gobierno una "mayor transparencia" a la hora de ofrecer datos sobre la hepatitis C.

"Pedimos a las autoridades un cambio en la perspectiva asistencial. Es necesario modificar el modelo actual por otro en el que se tengan en cuenta los avances tecnológicos porque los pacientes estamos viendo con preocupación el acceso a los nuevos tratamientos", ha zanjado Cristófol.