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El Congreso de los Diputados instará al Gobierno, a través de una proposición no de ley presentada por el Grupo Parlamentario de GER-IU-ICV y aprobada por unanimidad, a rechazar la introducción de cualquier forma de copago en el Sistema Nacional de Salud (SNS) por entender que “afectaría gravemente” los principios básicos del derecho a la salud, así como la accesibilidad, la universalidad y la gratuidad en la atención integral de los pacientes.

 

El texto de la proposición, defendida por el diputado Gaspar Llamazares y que salió adelante con la inclusión de una enmienda socialista, señala que la mejora de la eficiencia en la gestión y la política de salud pública, junto con un sistema de financiación autonómica adecuado, dan “un margen suficiente al Sistema SNS” para prescindir de hablar del copago en el marco del futuro Pacto por la Sanidad.

 

Para Llamazares, rechazar “el fantasma del copago, que recorre Europa en forma del euro por consulta de Francia o el ticket moderador de Alemania”, significa rechazar una medida que, a su entender, supone “un ataque directo a la universalidad del acceso al SNS” y la ruptura de la cohesión del estado del bienestar, donde todos los ciudadanos, independientemente del grosor de su cartera, tienen derecho a la sanidad.

 

Como indicó el diputado de IU, “discriminar por razón de renta a determinados sectores de la población, dificultándoles el acceso a la sanidad, sólo conseguirá que problemas agudos de salud se conviertan en crónicos y que, en consecuencia, generen mayores costes sanitarios. Todo ello sin olvidar que el copago es una medida ineficaz cuando hablamos de ahorro”.