Medicina y humanidadesFARMACIA
Empieza una campaña de prevención de infecciones urinarias en farmacias y piscinas de Madrid
JANO.es · 21 julio 2010
La iniciativa, impulsada desde la Sociedad Española de Ginecología Fitoterápica, recomienda consumir arándano rojo para minimizar el riesgo de infección.
La Sociedad Española de Ginecología Fitoterápica (SEGIF) ha iniciado esta semana una campaña de prevención de la 'cistitis de luna de miel' en farmacias y piscinas de Madrid, que recomienda consumir arándano rojo para reducir el riesgo de contraer esta infección.
"En vacaciones se incrementan las infecciones urinarias causadas por las relaciones sexuales, antes conocida por 'cistitis de luna de miel', así como las debidas al baño en piscinas, según datos de la SEGIF", manifestó ayer la organización en un comunicado.
En esta iniciativa, que cuenta con la colaboración del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), se incluyen recomendaciones de higiene y sobre el uso del cranberry o arándano rojo americano en la prevención y tratamiento de la cistitis. De hecho, el 80% de la población madrileña estaría dispuesta a tomar arándano rojo para la cistitis, en lugar de un antibiótico, según una encuesta de INFITO.
El doctor Javier Haya, presidente de SEGIF y jefe del Servicio de Ginecología del Hospital de Ciudad Real, ha señalado que es importante orinar antes y después del acto sexual para reducir el riesgo de infección. "Los ginecólogos recomendamos, además, tomar cranberry de manera preventiva en períodos de incremento de las relaciones sexuales", ha añadido.
Agua dulce, mejor que salada
"La denominada 'cistitis de luna de miel' se trata de una inflamación que se presenta en algunas mujeres después de mantener relaciones sexuales", explican los expertos. "Además, suelen sufrir micciones dolorosas, sensación de escozor y necesidad de orinar con frecuencia, síntomas que se prologan durante un día o dos y desaparecen hasta que vuelven a tener relaciones sexuales", añaden.
Asimismo, en el caso del baño se ha visto que el agua dulce favorece las infecciones urinarias en mayor medida que el agua de mar, por lo que se recomienda cambiarse o secar bien el bañador tras salir de la piscina o un río, así como orinar.
Según han apuntado ambas asociaciones, las infecciones del tracto urinario representan entre un 5% y un 10% de las consultas de atención primaria, el 30% de las de urología y miles de ingresos en urgencias. En España, tan sólo en mujeres de entre 20 y 44 años se producen más de 3,5 millones de episodios anuales de cistitis aguda.
