La biotecnológica Biomar Microbial Technologies, especializada en microbiología marina y química de productos naturales, ha presentado su estrategia de actuación para los próximos años, en la que destaca la investigación de diversos compuestos de origen natural dirigidos al tratamiento de distintas patologías. Uno de los estudios que ya están en marcha (desarrollado junto con una universidad norteamericana) ha obtenido buenos resultados en sus primeras fases de investigación; se trata de diversos compuestos de origen natural que han demostrado su eficacia en el tratamiento del glioblastoma. También presentan buenas perspectivas los primeros estudios realizados con otros compuestos efectivos en la reducción de la actividad tumoral en el tratamiento de la leucemia.

Según explicó Antonio Fernández, consejero delegado de la firma, “nuestra actividad se basa en la búsqueda de nuevas dianas terapéuticas; estamos centrados en el tratamiento de la enfermedad. Desde el principio, nuestro objetivo principal en el campo de la investigación fue el cáncer, concretamente el de páncreas y el glioblastoma, dos tipos para los que en la actualidad no hay ninguna opción totalmente efectiva en lo que respecta a la supervivencia de los pacientes. Posteriormente nos hemos ido diversificando hacia otras patologías. Los compuestos que componen actualmente nuestra cartera se encuentran en fase preclínica; se trata de moléculas muy novedosas y es precisamente esa novedad estructural uno de los puntos fuertes de estos compuestos”.

Otra de las vías de investigación en tratamientos oncológicos son los compuestos con utilidad antiangiogénica. “Actualmente estamos desarrollando varios compuestos que inhiben el desarrollo de los vasos sanguíneos que alimentan a las células cancerígenas, lo que ofrece grandes ventajas frente a otros tratamientos oncológicos como la quimioterapia”, comentó Arturo Ayats, vicepresidente de Biomar.

Así mismo, la compañía está llevando a cabo estudios en el área de la esclerosis múltiple —“un sector del que nos sentimos especialmente orgullosos”, afirmó Ayats— y también en el de los antifúngicos. “Hemos descubierto microorganismos que han demostrado su eficacia como antifúngicos naturales con diferentes aplicaciones como, por ejemplo, la dermatitis atópica”, explicó Antonio Fernández.

La mayor colección europea de compuestos marinos útiles

La compañía destina más del 70% de sus ingresos a I+D y tiene previsto alcanzar en los próximos cinco años alrededor de 7 millones de euros brutos en beneficios, lo que supone un crecimiento superior al 20% anual. Para el consejero delegado, una las claves más importantes de este crecimiento es la creación de la mayor colección de compuestos marinos útiles de toda Europa, recopilada durante los últimos 15 años. “Esta colección de activos marinos es la que marca la diferencia; cuenta con más de 58.000 extractos y 1.500 compuestos de caldos de fermentación disponibles para ser utilizados en ensayos clínicos para abordar diferentes patologías. Con ello aspiramos a convertirnos en una de las compañías biotecnológicas punteras en los próximos años”.

Otra de las estrategias puesta en marcha por la compañía es una política intensa de internacionalización y la diversificación de sus unidades de negocio en diferentes segmentos empresariales.