PUBLICADO EN 'PLOS MEDICINE'
La enfermedad cardíaca, causa principal de la elevada mortalidad en personas con obesidad mórbida
JANO.es · 10 julio 2014
Un IMC entre 40 y 59 kg/m2 se traduce en una pérdida estimada de 6,5 a 13,7 años de vida, según un metaestudio estadounidense que incluía a más de 9.500 individuos.
La obesidad mórbida, la de un índice de masa corporal (IMC) superior a 40 kg/m2, está vinculada a tasas más altas de mortalidad, según un estudio realizado por un equipo de investigadores del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, liderado por Cari Kitahara.
Los científicos llegaron a estas conclusión tras evaluar los datos de 20 estudios prospectivos de cohorte, principalmente del Consorcio de Cohorte del Instituto Nacional del Cáncer estadounidense. Después de excluir a las personas que siempre habían fumado y a aquellas con antecedentes de enfermedad crónica, el análisis incluyó a 9.564 adultos que fueron clasificados como obesos de mórbidos basándose en la altura y el peso al inicio del estudio y 304.011 adultos de peso normal.
Entre los participantes con este tipo de obesidad, las tasas de mortalidad (muertes por cada 100.000 personas por año) durante el período de estudio, de 30 años, fueron 856 para los hombres y 663 para las mujeres, frente a las tasas de mortalidad de los hombres y las mujeres de peso normal, que fueron de 346 y 280, respectivamente.
La enfermedad cardíaca es el principal contribuyente a la tasa de mortalidad más alta entre los individuos con obesidad extrema, seguida por el cáncer y la diabetes. Por otra parte, el riesgo de muerte por cualquier causa y fallecimiento por enfermedad del corazón, cáncer, diabetes y otras patologías aumenta con el incremento del IMC. En comparación con los que tienen un peso normal, un IMC entre 40 y 59 kg/m2 se traduce en una pérdida estimada de 6,5 a 13,7 años de vida.
La precisión de estos resultados está limitada por el uso en su mayoría de medidas de altura y peso proporcionadas por los participantes para calcular el IMC y por el empleo del IMC como la única medida de obesidad. Estos resultados pueden no ser generalizables a todas las poblaciones, pero indican que la obesidad de mórbida se asocia con un aumento sustancial de la tasa de mortalidad y destacan la necesidad de desarrollar intervenciones más eficaces para reducir la población afectada.
Los autores resumen: "La obesidad mórbida se asocia con el exceso de las tasas de mortalidad total y la mortalidad debido a una amplia gama de causas, en particular las enfermedades cardiacas, el cáncer y la diabetes, y el riesgo de muerte en general y por estas causas específicas sigue aumentando conforme se elevan los valores de IMC".
"Hemos detectado que la reducción de la esperanza de vida asociada con la obesidad mórbida fue similar a y para valores de IMC por encima de 50 kg/m2, incluso mayor que la observada para quienes fuman en la actualidad", concluyen.