OBESIDAD
JANO.es · 29 diciembre 2011
Un estudio llevado a cabo en 500.000 estadounidenses señala que la mayoría de los individuos obesos mayores de 50 años se hallan 'blindados' por su densidad ósea y su corpulencia.
Las personas adultas que padecen obesidad son más propensas a sufrir caídas, aunque la mayoría de ellas no registra daños importantes, puesto que están 'protegidas' por la densidad de sus huesos y su corpulencia, según se desprende de un estudio estadounidense publicado en Journal of the American Geriatrics Society.
"Las personas que son obesas pueden tener dificultades para mantener el equilibrio", ha señalado uno de los investigadores, Christine Limes, de la Universidad Syracuse de Nueva York (EEUU), quien ha precisado que aquellas que dejan de correr reaccionan menos rápido que el resto a la hora de evitar la caída.
La investigación, que se llevó a cabo entre 1998 y 2006 y se basó en más de 10.755 personas mayores de 65 años, encontró que los adultos obesos eran más propensos a sufrir caídas (entre el 12 y el 50%) que los individuos con peso normal. Asimismo, las personas con un índice de masa corporal superior a 40 tienen el doble de posibilidades de caerse.
En general, durante este periodo de tiempo, se registraron un total de 9.621 caídas, que provocaron más de 3.100 daños que precisaron de asistencia sanitaria.
Por otro lado, la mayoría de los obesos adultos, con un índice de masa corporal superior a 40 eran tres veces menos propensos que las personas con peso normal a sufrir heridas graves tras las caídas.
Asimismo, los que tenían una masa corporal entre 35 y 40 sufrían menos daños (en un 39%) que aquellos que tenían un peso adecuado; y los que tenían una masa corporal de entre 30 y 35 tenían menos riesgos de sufrir daños (17%). En conclusión, las personas que no tenían una obesidad tan acusada no gozaban de tal 'efecto protector'. De hecho, tenían un riesgo más elevado de padecer daños tras las caidas, en comparación con las personas de peso normal.
Sin embargo, a pesar de que las personas obesas no resultaban heridas de gravedad tras las caídas, cuando padecían daños les costaba más recuperarse que al resto. "Es más difícil que las personas obesas se recuperen de las heridas. Están en peor forma física", precisa Himes.
"Se estima que más de un tercio de estadounideses mayores de 65 años sufren caídas cada año", informa el investigador. "Se trata de una razón más para que la obesidad sea definida como un importante problema de salud pública", ha concluido.