PEDIATRÍA
Los niños asmáticos que viven en ciudades necesitan más controles
JANO.es · 14 noviembre 2007
Investigadores estadounidenses muestran en "Pediatrics" que en menores afectados por la enfermedad que viven en el medio urbano los síntomas cambian de leves a graves en unos pocos meses
Según el informe Las Personas Mayores en España, realizado por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), en nuestro país vivían a 1 de enero de 2005 más de 7,3 millones de personas mayores de 65 años, lo que equivale a un 16,7% de la población, porcentaje que en 2004 era del 17%. Esta cifra es similar a la de países de nuestro entorno, como Italia (17,2%), Francia (16,3%), Alemania (16,4%) o Reino Unido (15,9%). Alrededor del 58% de las personas mayores son mujeres.
Los octogenarios son el colectivo que más ha crecido en los últimos 15 años, un 66%, frente al 13% de crecimiento en el total de la población, y ya son cerca de 2 millones. Por comunidades, Castilla y León, Asturias, Galicia y Aragón cuentan con más de un 20% de población mayor de 65 años, mientras que Islas Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla son las menos envejecidas. En cuanto a su lugar de residencia, el 71,7% de los mayores residen en municipios urbanos, el 17,3% en rurales intermedios y el 11% en municipios propiamente rurales.
Por otra parte, los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida de las Personas Mayores 2006, elaborada por el CIS, revelan que un 46,5% de la población mayor manifiesta tener un estado de salud bueno o muy bueno, aunque con diferencias considerables según el sexo: el 54,4% de los hombres lo definen así, mientras que en el caso de las mujeres el porcentaje desciende hasta el 40,6%. Por otro lado, el porcentaje de mujeres que consideran que su salud es mala o muy mala prácticamente duplica al de los hombres de la misma opinión (17,5% y 9,8% respectivamente).
Satisfechos con la vida
Los principales temores de los mayores se refieren a la pérdida de un ser querido, a la pérdida de memoria, a sufrir enfermedad y dolor o a no poder valerse por sí mismos. La mayoría se muestra bastante satisfecha con su situación actual y, en especial, de la relación con sus familiares, mientras que el 70% se siente satisfecho “con la vida en general”.
El tipo de dolencia predominante autodeclarada por los mayores es la osteomuscular. Así, el 31% declara que la enfermedad que limitó su actividad estaba dentro de la categoría “artrosis, reumatismo, dolor de espalda”, seguida de las del corazón, con el 21,2%. Es decir, casi un tercio de los mayores ha declarado problemas osteomusculares, que además son los causantes del mayor número de discapacidades. Las mujeres declaran este tipo de dolencia en proporciones muy superiores a los varones, mientras que éstos señalan más problemas de corazón y aparato respiratorio, posiblemente en relación con hábitos de vida menos saludables.
Por lo que se refiere a la nutrición, el informe señala que las personas mayores llevan una dieta más equilibrada. Un 84,2% toma fruta fresca a diario frente al 55,2% de aquellos que tienen entre 16 y 44 años. La carne a diario es consumida por sólo el 14% de las personas de edad frente al 21,8% de los jóvenes y adultos. Los mayores también ingieren más verduras y hortalizas y menos embutidos y fiambres.
La forma de convivencia mayoritaria de la población mayor es la pareja (41,7%). Los mayores mantienen un contacto cercano con sus familiares. El 35% vive con algún hijo (la mayor parte de estos casos se refieren a hijos que viven en casa de sus padres) y, en caso de no convivir, 4 de cada 5 mayores mantiene contactos semanales con ellos y vive en un radio cercano. En el caso opuesto, 1 de cada 5 mayores vive solo. La soledad incide sobre todo en el género femenino. El 29% de las mujeres mayores se encuentra en esta situación, frente al 11% de los varones.