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CIRUGÍA

Apendicectomía en embarazadas y riesgo fetal

JANO.es · 04 diciembre 2007

Un nuevo estudio concluye que la intervención puede dar lugar a muerte del feto o a nacimiento prematuro, por lo que los autores subrayan la necesidad de que el diagnóstico de apendicitis sea muy preciso

El rol del médico de atención primaria (AP) juega un papel muy relevante a la hora de avanzar en el desarrollo organizativo de los sistemas sanitarios. Esta es la principal conclusión del foro internacional “La AP, eje de la reforma de los sistemas públicos de salud europeos”, celebrado recientemente en Barcelona.

Este encuentro, organizado por la Fundación Salud, Innovación y Sociedad y el Colegio de Médicos de Barcelona, examinó las nuevas corrientes de actualización de la AP en el contexto de la reforma que está teniendo lugar en el Reino Unido y en la consolidación de la organización multimodelo de la atención de primer nivel sueca.

En Inglaterra, la primaria es el eje sobre el que gravita la “reforma de la reforma” del sistema sanitario público en una compleja transición desde la integración vertical del monopolio del National Health Service (NHS) a la reintroducción de la competencia de mercado en algunas dimensiones de la prestación universal. La Dra. Liz Kendall, asesora de la ministra de Salud, defendió la gestión del gobierno laborista en cuanto a las reformas de la AP y abogó por la descentralización del NHS, uno de los grandes —y más difíciles de resolver— desafíos a los que se enfrenta el sistema.

Modelo sueco

En cuanto al modelo sueco, muy descentralizado, el Dr. Ander Anell, director del Instituto de Economía de la Salud de la Universidad de Lund, relató los problemas a los que se enfrenta la AP en su país en donde los pacientes se dirigen directamente a los hospitales y a los especialistas. El Dr. Anell comentó que faltan recursos financieros y humanos y que existe una “falta de confianza por parte del usuario hacia el médico de AP al que le concede un status inferior al de otros especialistas”.

Por otra parte, el desdén por parte de los otros especialistas, la inferioridad salarial o la ausencia de participación en la gestión se cuentan entre las numerosas causas que explican la desmotivación de los profesionales de la AP. Como indicaron los Dres. Amando Martín Zurro, coordinador de la Unidad Docente de Medicina Familiar y Comunitaria de Cataluña, y Miquel Vilardell, catedrático de Medicina Interna de la Universidad Autónoma de Barcelona, “los problemas de la AP de nuestro país ya están diagnosticados. Ahora es el momento de pasar a la acción”.

Confianza nominal

El Dr. Albert Jovell, presidente del Foro Español de Pacientes, coincide en señalar que la crisis en la que se encuentra el actual modelo sanitario también afecta a la AP, cuyo desarrollo considera “el mayor progreso en materia de salud alcanzado durante el pasado siglo”. Entre los principales problemas, según su opinión, debe destacarse la falta de permeabilidad del primer nivel asistencial, poco sensible a escuchar la voz de los pacientes. “Sin embargo —concluyó—, resulta significativo que hasta un 80% de los usuarios conozca el nombre de su médico, sobre el que además tiene depositada una elevada confianza”.

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