INVESTIGACIÓN
JANO.es · 30 septiembre 2009
Seguirá trabajando al frente del Grupo de Oncología Experimental y niega que la decisión obedezca a una disconformidad con los presupuestos
El todavía director del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), Prof. Mariano Barbacid, abandonará dicho cargo en próximas fechas ya que considera que “ha acabado su etapa al frente de este organismo”, del que se le encargó su creación en 1998.
A este respecto, fuentes del Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINNI) han confirmado que el Prof. Barbacid seguirá en la dirección hasta que encuentre un sucesor, para lo que se abrirá un proceso de selección interna en el que participarán el Patronato de la Fundación CNIO y el propio ministerio. Además, también continuará sus trabajos en el centro como jefe del Grupo de Oncología Experimental.
El Prof. Barbacid anunció su intención de abandonar la dirección del CNIO en la tarde de ayer con motivo de la reunión del Patronato, para después comunicar su decisión a los jefes de cada grupo de investigación. En ningún caso se trata de una decisión improvisada, sino que, según afirman desde el propio CNIO, es algo meditado durante mucho tiempo y no obedece a una disconformidad con los presupuestos que se destinarán al centro el próximo año.
Así, el motivo de la marcha, explican estas fuentes, es que considera que ya ha finalizado la fase de desarrollo del centro después de 11 años de su creación, sobre todo después de que en el pasado mes de junio se anunciara el inicio de un nuevo programa de Investigación Clínica. Además, actualmente el CNIO se considera un centro de excelencia y está considerado dentro de los diez mejores centros del mundo en investigación en cáncer.
Aisló el primer oncogén humano
Nacido en Madrid en 1949, el Prof. Barbacid está considerado como uno de los mejores investigadores españoles de la historia. Licenciado en Bioquímica por la Universidad Complutense de Madrid (1978), realizó sus trabajos postdoctorales en el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos (NCI), donde estableció su propio grupo para trabajar sobre la Biología Molecular de los tumores humanos y aisló el primer oncogén humano en 1982.
Otros hallazgos de importancia en los que ha participado son la identificación del oncogén Ras (1984), el descubrimiento de los receptores de la tirosínkinasa (1986) y el estudio de los receptores de la familia NGF de factores neurotróficos (1991).
Además, tiene más de 240 publicaciones en revistas científicas y ha sido premiado con la medalla de honor de la Agencia Internacional de Investigación en Cáncer, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Steiner Prize, el Ipsen Prize y el Brupbacher Cancer Research Prize. En 1995 fue nombrado doctor honoris causa por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander.