VACUNAS
JANO.es · 30 septiembre 2009
Considera muy improbable que causara la muerte de la adolescente británica fallecida el lunes
Las autoridades sanitarias británicas consideran “poco probable” que Cervarix®, la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) de GlaxoSmithKline (GSK), fuera la causa de la muerte de la adolescente que falleció el pasado lunes en Coventry (Reino Unido) tras recibir una dosis. En este sentido, apuntaron que la joven podría tener algún problema de salud previo.
Los primeros resultados de la autopsia, practicada en el Hospital Universitario de Coventry donde fue atendida, ya han revelado que la paciente presentaba “una condición médica subyacente grave que probablemente haya causado la muerte”, según ha explicado al Dra. Caron Grainger, directora del Sistema Nacional de Salud (NHS) de Coventry. Según sus palabras, “estamos esperando más resultados de los análisis que tardarán un tiempo. Sin embargo, los indicios dicen que es muy improbable que la vacunación contra el VPH haya sido la causa de la muerte”.
GSK ha retirado voluntariamente el lote de la vacuna utilizada con esta joven, a la espera del resultado de una investigación.
La adolescente enfermó este lunes, tras ser vacunada en la Escuela Blue Coat de Coventry, bajo el programa nacional de inmunización contra el VPH. Sólo un pequeño grupo de niñas vacunadas también en la misma escuela notificó haber sufrido mareos y náuseas por las que, no obstante, no tuvieron que ingresar en un hospital.
El Departamento de Salud británico ha señalado que no hay planes de detener el programa bajo el cual se han administrado ya más de 1,4 millones de dosis de Cervarix®. El programa de vacunación de niñas de 12 y 13 años comenzó en Reino Unido en septiembre de 2008. El cáncer cervical o de cuello de útero se ubica en el puesto 12 entre los tumores más comunes entre las mujeres británicas, con más de 1.000 muertes anuales.