EPIDEMIOLOGÍA

El verano pasado se produjeron en España 1.857 muertes atribuibles al calor

Instituto de Salud Carlos III · 17 junio 2021

El verano pasado se produjeron 1.875 defunciones atribuibles al exceso de temperatura en España, el 56 por ciento de ellas en el mes de agosto. El grupo de edad más afectado fue el de más de 74 años, que concentró el 90 por ciento de las defunciones, según el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).

Durante 2020 se estima que un 1,8 por ciento de exceso de defunciones por todas las causas estuvo asociado al exceso de temperatura. El resto del exceso de mortalidad identificado por MoMoCalor podría atribuirse a causas diferentes, como la infección directa por COVID-19, la mortalidad indirecta de la pandemia de COVID-19 o cualquier otra causa de defunción.

Estos datos, registrados en el informe 'MOMOCalor de Estimaciones de la Mortalidad atribuible a Excesos de Temperatura en España', recogen el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 15 de septiembre de 2020. Entre estas fechas fueron frecuentes los episodios cálidos, destacando dos episodios de temperaturas notablemente por encima de lo normal. El primero tuvo lugar entre el 25 de julio y el 2 de agosto, y el segundo entre el 6 y el 10 de agosto, ambos catalogados por Agencia Española de Meteorologista (AEMET) como olas de calor.

En el verano de 2020 se observó una gran heterogeneidad geográfica en las temperaturas registradas en España. Y la mortalidad atribuible al exceso de temperatura en el verano de 2020 fue superior a la observada en los veranos de 2017 y 2018, pero menor que en los veranos de 2019, 2016 y 2015 y considerablemente menor que la observada en el verano 2003.

En las comunidades autónomas de Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y Navarra el exceso de defunciones atribuibles al exceso de temperatura se situó por encima del percentil 75 de los porcentajes de exceso de mortalidad registrado en todas las autonomías en el verano de 2020.

En zonas del centro y este de Andalucía, así como en puntos del este de Extremadura, oeste de Castilla-La Mancha y suroeste de Madrid, el verano resultó extremadamente cálido, con temperaturas sobrepasaron el valor máximo registrado por AEMET en el periodo de referencia 1981-2010.