ONCOLOGÍA
Falta de información a pacientes con cáncer de mama
JANO.es · 26 noviembre 2007
Según una encuesta de la Fundación por la Educación y la Formación en Cáncer, realizada a 347 mujeres de Barcelona, el 65,41% de las afectadas no recibe información sobre el tratamiento a seguir
En Alboroque, palabra árabe que significa “regalo”, los conceptos y la filosofía se transforman en alta cocina construida sobre tradición y reinterpretación.
Andrés Madrigal es un gran tipo: honrado, serio, respetuoso. Pero, además, es inteligente, culto, despierto, inconformista, con ganas de hacer cosas y con gran ilusión por seguir aprendiendo. Gabriel García Márquez, después de una comida en Balzac, llegó a decir que no sabía si le gustaban más las palabras de Madrigal o su cocina. En definitiva, un tipo al que hay que tener en cuenta y no perder de vista: donde esté él, seguro que se cuece algo importante.
Y ahora se está cociendo en Casa Palacio Atocha 34, la antigua casa palacio de los marqueses de Riscal, construida a mediados del siglo XIX. Se trata de un proyecto diferente que quiere dar respuesta a un sinfín de iniciativas: este nuevo proyecto de Andrés Madrigal y su equipo se propone educar y dar a conocer los más diversos aspectos de la cocina. Es Alboroque Espacio Exclusivo mucho más que un restaurante, un laboratorio gastronómico y enológico abierto a todas las experiencias desde distintos espacios.
Casa Palacio Atocha 34 es un espacio polivalente: Alboroque El Taller de Madrigal, Alboroque Restauradores, Alboroque La Cava y Alboroque La Escuela.
En El Taller de Madrigal, Andrés Madrigal, junto a su joven equipo, desarrolla su personal cocina presentándola en menú cerrado compuesto por cinco semiplatos y postre que cambian cada día. Todo está pensado y cuidado hasta el último detalle. Por ejemplo, la música: cada menú se acompaña por una propuesta musical diferente. Tampoco podía faltar el arte: en este nuevo templo culinario obras de importantes artistas contemporáneos, como Eduardo Arroyo, protagonizan varios espacios.
En los pisos superiores de esta preciosa casa palacio de la calle Atocha, que sin embargo pasa inadvertida desde la calle, diferentes espacios bautizados como food art serán los “comedores” de los mejores cocineros nacionales e internacionales invitados para dar a conocer su cocina: una forma de acercar la cocina de todo el mundo a la gente.
Los amantes del buen vino podrán seleccionar su propia bodega con sus vinos preferidos en Alboroque La Cava.
Y, además, este ambicioso proyecto cuenta con una escuela de alta cocina para aquellos profesionales deseosos de descubrir una cocina creativa que profundice en la sensibilidad de la degustación y en el análisis de los procesos de creación.
Alboroque. Casa Palacio. Atocha, 34. Madrid. Tel.: 91 389 65 70.