POLÍTICA SANITARIA
JANO.es · 11 octubre 2011
La Unió Catalana d'Hospitals que engloba a 380 centros, presenta el informe 'Repensando el modelo sanitario', en que advierte a las autoridades de que un nuevo tijeretazo debería ir acompañado de un cambio estructural del modelo sanitario.
La patronal sanitaria La Unió, que engloba a 380 centros que emplean a 45.000 trabajadores en Cataluña, considera "inasumibles" nuevos recortes presupuestarios en el sector durante 2012.
En la presentación, ayer, del Informe 'Repensando el modelo sanitario', el presidente de la organización, Manel Jovells, afirmó que un recorte del 10% es el "máximo asumible", por lo que un nuevo tijeretazo, por lo que un nuevo tijeretazo debería ir acompañado de un cambio estructural del modelo sanitario.
Jovells manifestó que el proceso de aplicación del tijeretazo está siendo "doloroso y complicado", aunque alabó el coraje y la valentía de la Consejería de Salud de la Generalitat por aplicar estos recortes, que ha ceñido a una situación "extraordinaria".
El departamento que lidera Boi Ruiz, precisamente ex dirigente de La Unió, ha reducido este año al menos un 3% la contratación de actividad sanitaria al ámbito concertado y ha reducido las tarifas de esta compra un 2% respecto al año anterior.
El informe de La Unió contiene un centenar de propuestas para mejorar el sistema sanitario, entre las que se encuentra limitar la cartera de prestaciones sanitarias y mantener las estrictamente necesarias, prescindiendo, por ejemplo, de ciertos tratamientos como los de fecundación 'in vitro'.
Tanto Jovells como la directora general de La Unió, Helena Ris, defendieron que las prestaciones necesarias estén garantizadas por el sistema público, y que la podología de atención rimaria, por ejemplo, se derive a mutuas privadas, en función de la renta del paciente.
En esta línea, la patronal pretende relanzar el debate del copago sanitario para fármacos y servicios, también en función de la renta, al observar que un medicamento podría dejar de ser gratis para un pensionista con renta alta, y un paciente en activo podría pagar más del 60% de la receta de la Seguridad Social. "No podemos pagarlo todo siempre", ha aseverado Jovells, quien llamó a poner encima de la mesa el binomio eficacia-costes.
Más recursos, menos expectativas
El objetivo de ambas propuestas pasa por aportar más recursos al sistema sanitario y poner fin al "todo es universal y todo es gratis sobre el que gira el sistema sanitario público", cuyo 84% de actividad hospitalaria y 92% de sociosanitaria soporta el ámbito concertado. "Queremos mantener la excelencia del sistema", señalaron los responsables de La Unió, para lo que abogan por acabar con los defectos que arrastra.
"Hace falta mejorar el sistema de financiación de la sanidad" porque el dinero que se le destina es de los más bajos a nivel europeo, arguyó Ris, quien, asimismo, pidió más corresponsabilidad a los ciudadanos y rechazó el 'euro por visita' como fórmula para disuadir el exceso de demanda y generar ingresos.