TRAUMATOLOGÍA Y ORTOPEDIA
Los ftalatos y las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoradas pueden afectar a la salud ósea de los adolescentes varones
Eurekalert · 13 mayo 2022
Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoradas (PFAS) y los ftalatos, dos tipos de sustancias químicas que alteran el sistema endocrino, pueden estar asociadas a una menor densidad mineral ósea en adolescentes varones, según un nuevo estudio publicado en el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism.
Las sustancias químicas que alteran el sistema endocrino son productos químicos o mezclas de productos químicos que interfieren en el funcionamiento de las hormonas.
Las PFAS son sustancias químicas sintéticas que se utilizan en utensilios de cocina antiadherentes, ropa y envases de alimentos, y se encuentran cada vez más en los suministros de agua. Los ftalatos se utilizan en productos de cuidado personal, en la elaboración de alimentos y en los juguetes de los niños.
"La adolescencia es una época importante en la que nuestros cuerpos acumulan huesos. Casi todos los niños y adolescentes de Estados Unidos están expuestos a PFAS y ftalatos, pero son pocos los estudios que han analizado cómo estas sustancias químicas podrían estar afectando a nuestra salud ósea", afirma Abby F. Fleisch, del Instituto de Investigación del Centro Médico de Maine y del Centro Médico de Maine (Estados Unidos).
"Nuestra investigación encontró una asociación entre ciertas PFAS y ftalatos y la reducción de la densidad mineral ósea en varones adolescentes -añade-. Dado que la acumulación ósea se produce principalmente durante la adolescencia, si se reproduce, este hallazgo puede tener implicaciones para la salud ósea de por vida".
Los investigadores estudiaron muestras de orina y sangre de 453 chicos y 395 chicas de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) y descubrieron que los niveles más altos de PFAS y ftalatos pueden estar asociados a una menor densidad mineral ósea en los adolescentes varones. No encontraron el mismo efecto en las chicas.
Referencia: J Clin Endocrinol Metab. 2022;dgac228. doi:10.1210/clinem/dgac228