MEDICINA DE FAMILIA

Médicos e industria cuestionan la prescripción por principio activo

JANO.es y agencias · 18 octubre 2007

Médicos de AP y representantes de la industria farmacéutica consideran que da prioridad a los criterios económicos en lugar de basarse en la evidencia científica

El número 8 de la revista REDES se centra en la labor que desarrollan los casi 400 investigadores de la Red Temática de Investigación Cooperativa en Enfermedades Cardiovasculares

 Casi 400 investigadores trabajan en la Red Temática de Investigación Cooperativa en Enfermedades Cardiovasculares (RECAVA) para reducir el dramático impacto de las estas patologías en la salud de los españoles. La evolución de esta Red desde su creación en 2003 y sus principales logros centran los contenidos del número 8 de la revista REDES, que publica Farmaindustria.

La RECAVA, que depende del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), es una sólida estructura reticular --basada en 22 grupos de investigación de 9 comunidades autónomas, 19 grupos clínicos asistenciales y 6 plataformas tecnológicas comunes-- que facilita la interrelación de los investigadores básicos, clínicos y epidemiológicos y el uso compartido de complejos recursos tecnológicos, formando, además, a la nueva generación de científicos que necesita la investigación cardiovascular española.

Rentabilidad social

Como explica su coordinador, el Prof. Francisco Fernández Avilés, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón (Madrid), la Red "trata de potenciar la eficacia y la rentabilidad social de la investigación cardiovascular. Para ello desarrolla un programa organizado en líneas de investigación longitudinales que abordan de forma integral las manifestaciones de las cardiopatías, desde la básica a la clínica y los aspectos epidemiológicos; y en líneas transversales, centradas en el estudio de situaciones mecanísticas, diagnósticas, terapéuticas, de servicios asistenciales y epidemiológicas comunes a todas ellas".

Además, para el Prof. Fernández Avilés, "la RECAVA debe despertar el interés y la vocación por la investigación cardiovascular traslacional entre los científicos más jóvenes, clínicos y no clínicos, y producir resultados concretos aprovechando la masa crítica de investigadores que integran la Red y la estructura del Sistema Nacional de Salud".

El Prof. Javier Díez, director del Programa de Formación de la Red y del Área de Ciencias Cardiovasculares del CIMA (Pamplona), considera que "la RECAVA es un instrumento eficaz para estimular la investigación traslacional, facilitando las sinergias entre grupos y el intercambio de información entre científicos, así como impulsando una investigación cooperativa que posibilite una rápida transferencia de sus hallazgos a la práctica clínica".

Por último, el Prof. Antonio D. García Dorado, director de Investigación de la RECAVA y jefe de Sección del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario Vall d'Hebron (Barcelona), cree que "nos encontramos ante una coyuntura histórica para avanzar en la investigación cardiovascular. Si realmente existe una oportunidad para demostrar que la investigación reticular funciona en algún contexto, esa la tenemos nosotros y estoy convencido de que no la desaprovecharemos".

Investigación a gran escala

Entre los diversos contenidos de esta ambiciosa publicación dedicada a la investigación biomédica, también figura un artículo --elaborado por los Profs. Valentín Ceña, subdirector general de Redes del ISCIII, y Francisco Gracia, director del citado Instituto-- que dibuja el mapa de la investigación biomédica a gran escala que se está llevando a cabo en España a través de los distintos Centros de Investigación Biomédica en Red (CIBER) y las Redes Temáticas de Investigación en Cooperación en Salud (RETICS).

Desde el año 2002, la industria farmacéutica alimenta de forma muy importante el presupuesto del ISCIII, pero será en 2007 cuando estas aportaciones alcancen su cenit: alrededor de 102 millones de euros con los que se financiará el 31,02% de su presupuesto. En definitiva, y sólo en los últimos 3 años, las compañías farmacéuticas aportaron al ISCIII 294 millones de euros. La RECAVA cuenta con una financiación de 3,1 millones de euros.