GINECOLOGIA

Robot para cirugía ginecológica

JANO.es · 03 diciembre 2007

Fue presentado en Barcelona por el Dr. Javier Magriñá, jefe de Ginecología Oncológica de la Mayo Clinic de Scottsdale (Estados Unidos)

Más de un tercio de la población de EE.UU., cerca de 300 millones de personas, será diagnosticada de cáncer —probablemente, dada su mayor prevalencia, de cáncer de mama, de próstata o colorrectal— a lo largo de su vida. Afortunadamente, los especialistas estiman que el número de supervivientes se incrementará significativamente en el próximo cuarto de siglo, continuando con los progresos alcanzados en la especialidad en las últimas décadas. De hecho, hasta un 86% de los 10,5 millones de estadounidenses que, aún vivos en la actualidad, ha sobrevivido a un cáncer fue diagnosticado de la enfermedad en los últimos 20 años.

En palabras de la Dra. Patricia A. Ganz, de la Facultad de Medicina y Salud Pública de la Universidad de California en Los Ángeles (EE.UU.), “la tasa de supervivencia a los 5 años en la población diagnosticada antes de cumplir los 15 años creció 22 puntos, del 58 al 80%, entre los años 1975 y 1997. Es decir, una media del 1,68% anual. Y la mejora de la supervivencia en los pacientes adultos, muy especialmente en aquellos con edades entre los 50 y los 80 años, resulta igualmente muy significativa”.

El 66% de los 10,5 millones de supervivientes es mayor de 65 años, estableciéndose la media de edad en los 69 años en el caso de los varones y en los 64 en el de las mujeres. Sin embargo, y además de, lógicamente, el género, existen diversos factores que influyen de manera decisiva sobre la supervivencia: a modo de ejemplo, los datos presentados en la 43 Reunión Anual de la ASCO confirman el incremento de la supervivencia de las pacientes con cáncer de mama en los últimos 20 años (20 meses en 1988-93 y 27 en 1999-2003). Pero sólo en la población blanca; la tasa en las mujeres negras se mantiene en los 17 meses observados en 1988-93. Las razones para esta diferencia permanecen desconocidas, si bien los expertos apuntan a “posibles” desigualdades en el acceso a la sanidad y los tratamientos.