BIOMEDICINA
JANO.es y agencias · 28 mayo 2010
El bloqueo de la actividad de este receptor podría detener, e incluso revertir, el crecimiento de los tumores del tejido humano, según una investigación.
Un receptor asociado a la muerte natural de las células, el CD95, puede ser uno de los responsables del crecimiento incontrolado de tumores cancerosos, por lo que bloquear la actividad de este receptor podría detener, e incluso revertir, el crecimiento de los tumores el tejido humano, según una investigación de la Universidad de Chicago y de la Universidad de Northwestern, publicada en Nature.
Según ha explicado el responsable de la investigación y profesor de la Universidad de Northwestern, Marcus Peter, "todas las células contienen este receptor para destruirse cuando están dañadas o enfermas, en un proceso conocido como apoptosis, de manera que el cuerpo elimina las células que ya no necesita".
En circunstancias normales, "este proceso comienza cuando el CD95 es activado por unas proteínas específicas, por lo tanto es un mecanismo fundamental para el normal funcionamiento del sistema inmune y para prevenir la formación de células cáncerosas", ha señalado.
Sin embargo, "aunque diversas investigaciones han sugerido que la pérdida de estos receptores pueden ser un principio de la formación de un cáncer, se ha demostrado que muchas personas con esta enfermedad continúan teniendo niveles altos de CD95, incluso cuando las células cancerosas se reproducen rápidamente", ha recalcado el investigador.
Los datos del estudio "han mostrado la posibilidad de que este receptor pueda potenciar el crecimiento de tumores, algo paradójico, ya que durante 20 años, los científicos han estado utilizando el CD95 para la eliminación de tumores", ha afirmado.
Durante la investigación, se aumentó o redujo el nivel de este receptor en células cancerosas lo que disminuyó drásticamente el crecimiento de las células en unos casos y en otros, mató las células. Cuando se redujeron las proteínas que activan al CD95, el efecto fue aún más drástico, deteniendo el crecimiento del tumor y llegando en algunos casos a desaparecer.
Según ha señalado Peter, serán necesarias más investigaciones para determinar cómo este receptor decide 'matar' o 'crecer'". Además, cuando se trataron las células cancerosas con inhibidores JNK también dejaron de crecer, por lo que se cree que este inhibidor podría causar ambos casos, según las concentraciones en las que se aplique.
Además, actualmente se está desarrollando un ensayo clínico en fase II sobre un fármaco que bloquea la molécula que activa CD95. Aunque en un principio se desarrolló para frenar la muerte de células afectadas por enfermedades degenerativas y sida, parece que también puede ser eficaz para matar células tumorales.