POLÍTICA SANITARIA
JANO.es · 25 noviembre 2009
Sin embargo, considera absurdo que las chicas de entre 16 y 18 años puedan abortar sin el conocimiento ni el consentimiento de sus padres
El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, ha manifestado hoy su indiferencia ante las consecuencias religiosas que podría tener su respaldo a la reforma de la ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Según sus palabras, “me importa tres cominos que me excomulguen o no me excomulguen, yo creo en la nueva ley del aborto”.
Y es que, según su opinión, “creo en esta ley de plazos. Además, existe en prácticamente todos los países europeos, incluso en Italia, donde está la Santa Sede y la influencia de la Iglesia ha sido fundamental”.
Sin embargo, el respaldo de Múgica al proyecto del Gobierno tiene una salvedad: la potestad que tendrían las chicas de entre 16 y 18 años de abortar sin conocimiento ni consentimiento de sus padres. “Esto me parece una tontería y estoy convencido de que se restablecerá el buen sentido en una ley que me parece totalmente necesaria”.